En sus últimos pronósticos, publicados a finales de abril, el banco esperaba una evolución del PIB de 1,5 por ciento en 2008-2009 y de 1,7 por ciento en 2009-2010, rebajando ya las cifras previstas en su último informe de octubre del 2007.
"El crecimiento económico prosigue su ralentización, reflejando una vez más el débil incremento de las inversiones de las empresas y del consumo privado", explicó el Banco de Japón en un comunicado.
El BoJ precisó, no obstante, que la segunda economía mundial en principio "regresará gradualmente a la vía del crecimiento moderado".
Es la segunda vez en menos de tres meses que el BoJ revisa a la baja sus previsiones de crecimiento, preocupado por un frenazo en el consumo y de la inversión así como por la aceleración de la inflación en su país.