Con los recursos financiarán la construcción y reparación de una carretera en República Dominicana que tiene 123 kilómetros y conecta la capital de esta isla, Santo Domingo, y la península de Samaná, en el nororiente del país.
El plan del gobierno dominicano con la adjudicación de la licitación es reducir el tiempo de viaje y aumentar el turismo en la zona. La obra tiene un costo de 178 millones de dólares y en 84 por ciento será financiada con préstamos de instituciones financieras y el 16 por ciento con recursos del mencionado organismo multilateral.
Víctor Salgado, el líder ante el BID, afirma en un comunicado de prensa de este organismo, que el desarrollo de la infraestructura vial facilitará el movimiento de lugareños, productores, comerciantes y turistas entre la península y el sur del país, propiciando el desarrollo económico en una región prioritaria.
El proyecto se denomina 'Boulevard Turístico del Atlántico' e incluye la rehabilitación de 99 kilómetros existentes y la construcción de un tramo de 24 kilómetros.
"Una vez sumadas las mejoras hechas por otra concesionaria, 'Autopistas del Nordeste', el tiempo de viaje entre Santo Domingo y Samaná se reducirá de cinco horas a por lo menos 2 horas", según Salgado.
Las obras de la 'Autopista del Nordeste', que también fueron realizadas y concesionadas a Odinsa y Grodco, atraviesa el país caribeño y tienen 106 kilómetros. Para financiar el proyecto en esa ocasión, los concesionarios recurrieron a una emisión, por 160 millones de dólares, en bonos en el mercado de valores de Estados Unidos.
Además de las dos firmas de ingeniería colombiana, participan como socios de 'Autopistas del Nordeste' algunas compañías dominicanas.