El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, expresó este viernes su convicción de que “el cambio llegará a Cuba” con la adopción en Washington de una nueva política hacia la isla, aunque señaló que eso no ocurrirá rápidamente.
“El cambio llegará a Cuba. Tiene que llegar. Tiene una economía que no funciona”, dijo Obama durante la última conferencia del año en la Casa Blanca, aunque admitió que “no puedo anticipar cambios de la noche a la mañana” en la isla. Para el presidente estadounidense, sería “poco realista que ahora busque ‘mapear’ dónde estará Cuba” para cuando termine su mandato en la Casa Blanca.
Cuba “ha dependido durante años de los subsidios de la Unión Soviética y luego subsidios de Venezuela. Eso no se puede sostener. Y cuando más los cubanos vean lo que es posible, más interesados estarán en un cambio”, comentó Obama. Ese cambio “podrá ocurrir rápido o podrá ocurrir más lentamente de lo que me gustaría. Pero va a ocurrir”, insistió el mandatario estadounidense.
Obama enfrió también las perspectivas de un viaje suyo a Cuba o de una visita del líder cubano Raúl Castro a Washington. “No estamos todavía en un escenario donde una visita mía a Cuba o del presiente Castro a los Estados Unidos esté en los planes. Yo no sé cómo esta relación se desarrollará en los próximos años”, apuntó. No obstante, dijo que se imagina que “en algún momento” de su vida tendrá “la oportunidad de visitar Cuba y de relacionarme con los cubanos. Pero no hay nada específico y no estamos trabajando” con esa perspectiva.
Obama alegó que su Gobierno no está en condiciones de levantar “unilateralmente el embargo” que Estados Unidos mantiene hace medio siglo contra Cuba. “Eso está codificado en ley. Creo que tendrá que haber un proceso y que el Congreso tendrá que digerir esto”, comentó.
POTENCIAL INFINITO
Las posibilidades económicas que se abren para Cuba tras el acuerdo de normalización de relaciones con Estados Unidos “son infinitas” y podrían acelerar las reformas económicas de Raúl Castro para actualizar el modelo socialista de la isla, según afirmaron analistas consultados por Efe.
“Creo que el cambio va a ser mucho más rápido de lo que pensamos porque las posibilidades son ilimitadas, principalmente porque se va a desbloquear uno de los principales problemas de Cuba, que es la entrada de divisas”, dijo el economista Omar Everleny, del Centro de Estudios de la Economía Cubana (CEEC). Aunque no hay cifras oficiales, se estima que cada año entran a Cuba unos 1.700 millones de dólares en remesas, fundamentalmente procedentes de los envíos de dinero que cubanos exiliados envían a sus familias, una cantidad “que se multiplicará exponencialmente” con las medidas de alivio del embargo anunciadas por Obama.
Este flujo de dinero beneficiará sobre todo a la iniciativa privada que se ha abierto en la isla en los últimos cuatro años, con negocios de “cuentapropistas” (trabajadores autónomos), que se cifran ya en casi medio millón.
“Un número significativo de estos negocios abrieron gracias a las remesas enviadas por familiares y ahora crecerán aún más”, indicó.
Everleny también se refirió a las posibilidades que se abren para la Ley de Inversión Extranjera, aprobada en marzo, que “gracias al acuerdo con Estados Unidos atraerá a firmas extranjeras que antes no se atrevían a invertir en la isla por miedo a sanciones”. A su juicio, los 2.500 millones de dólares que necesita Cuba para sostener sus reformas económicas “podrían llegar casi íntegramente para el 2015”.
EXILIO DE MIAMI ALISTA PROTESTAS
El exilio cubano en Miami se prepara para realizar, este sábado, su primera manifestación de protesta contra el anunciado restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Cuba, que ha despertado desde rechazo hasta esperanza. La concentración se llevará a cabo en el Parque de José Martí, a pocas manzanas de la Calle Ocho de la Pequeña Habana, donde el deshielo entre Washington y La Habana ha dividido a sus vecinos entre los que se sienten víctimas de una “traición” y los que ven este cambio como algo “positivo” y necesario. El histórico acercamiento ha pulsado el resorte emocional del exilio, principalmente en Miami, donde un gran número de organizaciones han reacciona- do con palabras muy duras: “Traición”, “decepción”, “dolor”, son algunas de las expresiones.
ESPALDARAZO PARLAMENTARIO
La Asamblea Nacional de Cuba (parlamento unicameral) aprobó ayer por unanimidad una declaración de apoyo a las decisiones adoptadas por el presidente de la isla, Raúl Castro, para iniciar la normalización de relaciones con Estados Unidos. El documento se ratificó en el segundo y último pleno que celebró ayer el Parlamento cubano, para analizar el comportamiento de la economía durante el 2014 y las previsiones para el 2015. El pleno se celebra en “circunstancias históricas excepcionales”, según destacó el presidente de la Asamblea, Esteban Lazos.