Lo dicen las estadísticas. Enero es un mes en el que, históricamente, las acciones tienen un importante repunte en los mercados. A esto se le conoce como el ‘efecto enero’, en el que, según los investigadores, los principales ganadores son las empresas más pequeñas o aquellas que tuvieron un rendimiento débil el año anterior.
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Durante años, se ha notado que el primer mes del año sorprende al mercado y esto tendría que ver por una recompra de acciones de bajo rendimiento en diciembre por parte de los inversores.
Esta tendencia, así como la publicación de los balances empresariales impulsarían los títulos de las compañías, especialmente las más pequeñas.
Aunque no se sabrá, a ciencia cierta, si en enero de 2022 habrá el mismo efecto, los expertos coinciden en que, en lo que resta de diciembre, es un buen momento para apostar por este tipo de acciones y monitorear las empresas pequeñas o que tuvieron una tarifa inestable en 2021, con el fin de sacarle provecho y ganar dinero.
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No obstante, cabe señalar que el mercado es dinámico y no hay certeza ni garantías de que esto ocurra.
De hecho, hubo muchos años, e incluso algunas décadas, en las que el 'efecto enero' no ha despegado.
Sin embargo, este comportamiento parece tener un cierto grado de peso histórico y analítico detrás.
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