Ahora, colegas directores, persuadidos de que sus películas atraerían a un público más amplio, están dispuestos a pagarle a Cameron por usar sus equipos.
La maravilla tecnológica también coincide con una campaña de Sony, Panasonic. y otras empresas de electrónica de consumo para llevar el 3D a los hogares con una nueva generación de aparatos de televisión y de DVD.
En el 2000, Cameron se puso en contacto con Vincent Pace, empresario que colaboró en el diseño y la fabricación del sistema de iluminación submarina para la película El abismo, también de Cameron. A través de su empresa, que desarrolla y alquila cámaras para usar en condiciones peligrosas, Pace aceptó trabajar con él y crear un equipo de filmación capaz de capturar imágenes en 2D y 3D simultáneamente.
Desarrollar la tecnología fue un proyecto enorme, pero aún más fue convencer a Fox de financiar Avatar. En el 2005, el estudio hizo una pequeña apuesta y le dio a Cemeron 10 millones de dólares para que probara la viabilidad del proyecto. Las cifras hablan ahora.