Continuando un proceso de redefinición de procesos y objetivos, empieza este año Credibanco, que no solo le apunta a tener servicios más cercanos al consumidor final en el país, sino que espera que la operación iniciada hace un año en Chile crezca. Gustavo Leaño, presidente de la firma, señala que esta estrategia les debe permitir tener unos ingresos superiores a los 80 millones de dólares.
Credibanco es una empresa colombiana con 40 años de experiencia en la administración y el desarrollo de sistemas de pago de bajo valor, que emplea a 800 personas.
¿Por qué el 2013 fue tan bueno para Credibanco?
Fue nuestro segundo mejor año en la historia, en términos de resultados, porque logramos crecimientos de dos dígitos en toda la organización.
Mejoramos en el procesamiento de transacciones; crecimos 20 por ciento en corresponsales bancarios, con 21 afiliaciones de comercio. Además, llegamos a 922 municipios, 100 más que en el 2012.
¿Eso requirió fortalecer la infraestructura?
Sí, calibramos los sistemas y estamos procesando 124 transacciones por segundo en momentos ‘pico’. La organización se fortaleció en plataformas, con billeteras móviles a disposición del mercado, para trabajar con entidades financieras. Además, productos de débito y crédito digitalizados para que los clientes hagan transacciones.
¿En qué consiste la redefinición del negocio?
Estamos construyendo un tema de inteligencia de negocios. Financieramente, esta organización es robusta, porque la industria de sistemas de pago se está desarrollando.
Durante 40 años representamos a Visa en Colombia, y desde hace dos años ellos tienen presencia local, por lo que asumimos el negocio de plataforma de tecnología para sistemas de pago, y fortalecemos la red de adquirencia y de terminales. Asimismo, montamos una procesadora de transacciones para que los bancos tercericen el servicio, y ese negocio lo hicimos en asocio con la española Tecnocom, con dos procesadoras, una en Colombia y otra en Chile.
¿A qué línea le apuestan este año en el país?
El año pasado creamos la marca local, Social. Estamos en el proceso de instalación operativa del producto para que haya una nueva marca para sistemas de pago. Se trata de una franquicia local, una tarjeta como Visa o Masterd Card, para débito y crédito, y productos prepagados, que funcionan en el móvil, es decir, comercio electrónico y transacciones persona a persona. Esta evolución de sistemas de pago, con oferta de valor, le permite a la banca llegar a segmentos de la población que piden productos de bajo costo. Creemos que este año va a despegar; estamos en conversaciones con tres bancos para iniciar el proceso.
¿El éxito de la innovación está en pensar en el consumidor final?
Sí, y representa una iniciativa nuestra de inteligencia de negocios: sofisticar el conocimiento del consumidor. Manejamos mucha electrónica y eso, sumado a la información que tienen los bancos, nos ayuda a medir comportamientos y estilos de vida, para personalizar las propuestas de valor, es decir, que se sienta mejor atendido por su banco.
Este es el segundo año de ejecución de ese plan y es una estrategia perfecta para crecer como organización y que nos proyecte como una multilatina.
¿Cómo va el proceso de internacionalización?
Con productos y servicios arrancamos con Chile hace más de un año. Estamos en el proceso de montaje de la oficina, explorando el mercado. Ya hay unos negocios en proceso contractual. Es una realidad que estamos allí.
El siguiente paso es ser partner de negocios de los bancos colombianos que están saliendo a otros mercados y Credibanco quiere ayudar a desarrollar esos negocios. También estamos mirando clientes en Centroamérica.
¿Cómo analiza la evolución de la inclusión financiera en el país?
“Somos el soporte que permite que la banca llegue a ese objetivo de inclusión financiera; somos la red que facilita que sean usados en el comercio. Trabajamos el modelo de ‘agregadores’, que permite que una compañía que tenga red, como Móvilred o Fullcarga, esté conectada a Credibanco, para que ellos sean el mecanismo para que en cada punto de venta se acepten débitos y créditos.
Credibanco debe hacer crecer la red de comercios para lograr que los nuevos bancarizados tengan cómo usar productos y encuentren buen servicio. Colombia tiene entre 23 y 25 millones de adultos y 18,6 tarjetas débito. Los países desarrollados tienen una tarjeta débito por habitante. Colombia tiene 350 mil tiendas de barrio y la red de comercio apenas 176 comercios, por lo que la posibilidad de aumentar los puntos de pago es muy grande. Hay un nuevo consumidor, jóvenes asociados a la tecnología y los pagos electrónicos, y eso ejerce presión para que la industria crezca y se profundice”.
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