Si, como lo pronostica el Fondo Monetario Internacional, la recuperación de la actual crisis corre por cuenta de las materias primas, gracias a buenos precios del petróleo, de metales como el oro o de alimentos, en Colombia buena parte de la esperanza está sobre los hombros de los cafeteros.
El gerente de la Federación de Cafeteros desde hace dos meses, Luis Genaro Muñoz, se refiere a esa cuota que aportará su sector para que el país supere la actual caída de la producción, en medio de buenos precios pero de un dólar inquietante.
¿Qué aporte se puede esperar del café a la recuperación de la economía?
Inmenso. Colombia el próximo año estará en una producción cercana a los 11 millones y medio de sacos. Este año se cierra con 9 millones de sacos como consecuencia de los pésimos climas y de los altísimos costos de los fertilizantes. Además, el programa de renovación de 300.000 hectáreas en los próximos cinco años, tiene un ritmo adecuado para renovar 60.000 anuales. Eso quiere decir que la caficultura empieza un ritmo ascendente en el volumen de producción.
Este año ha sido de buenos precios para el café, pero el dólar ha bajado en los últimos meses. ¿Que ha pesado más? ¿Ha habido mas beneficio por el precio que perjuicio por el dólar?
Hemos tenido beneficios por ambos lados, curiosamente, y le explico por qué: primero, el precio del Contrato C de la bolsa de Nueva York ha estado en un nivel mucho mejor que en los años anteriores, por un problema de oferta y de demanda y de inventarios. Segundo, la prima del café colombiano incluso llegó a tocar el dólar. Es un nivel bastante alto que significó desde luego mayores ingresos para los colombianos. Parte del año también vivimos el dólar a 2.600 pesos. Todos esos factores combinados son muy importantes para determinar el precio interno que es finalmente el valor que le llega al productor.
Si comparamos el año pasado, el precio promedio por carga fue aproximadamente de 545.000 pesos. Al cierre de septiembre las compras del fondo nacional han estado por el orden de los 737.000 pesos por carga. Entonces si bien es cierto que por un lado produjimos dos millones de sacos menos, por el otro lado logramos mejores precios, y finalmente el valor total de la cosecha va a ser muy similar al del año pasado. Alrededor de 3,8 billones de pesos.
¿Hay histeria con el dólar? porque usted suena diez veces más tranquilo que voces de otros gremios.
Una cosa es lo que parece y, como decimos en Popayán -expertos en procesiones-, "¡la procesión va por dentro!" Me quita horas de sueño. Pero nuestros contratos de protección también implican cierta protección al sueño. Cuando uno está asegurado, tiene un poco más de tranquilidad.
¿Les sugeriría a otros sectores, donde hay pánico, que adoptaran mecanismos de protección de la revaluación similares a los adoptados por los cafeteros?
Claro que sí. Creo que los están estudiando. Y este gremio está abierto a quien quiera profundizar sobre cómo funcionan estos mecanismos modernos de protección.
¿Cómo ve el escándalo de Agro Ingreso Seguro?
Si cogemos las dos principales líneas, la de crédito de DTF menos dos, y la de ICR, encontramos que 65.000 caficultores han recibido incentivos y beneficios. Hemos recibido aprobaciones de crédito por 389.000 millones de pesos. Eso implica que en esas dos líneas hemos recibido apoyos de 133.000 millones de pesos. Una cuantía muy importante para la caficultura colombiana. Y los cafeteros todos son chiquitos para estos efectos.
Pero el programa está en aprietos. ¿Qué evitaría que el torbellino político lo hunda?
Exactamente eso, en tres palabritas: quitémosle la política. Dejemos lo técnicamente concebido y correctamente aplicado. Quitémosle la política, y el programa es perfecto.
Franquicias antes de marzo
¿Qué balance saca hasta el momento de las tiendas Juan Valdez?
Yo diría que va muy bien. Procafecol es una empresa que ha ayudado a transformar los hábitos de consumo. Uno con una canita ya se siente medio incómodo en las tiendas porque están llenas de gente joven, departiendo sanamente, probando preparaciones de café y con un gran entusiasmo.
Eso es un apoyo al consumo interno que se le debe a las tiendas. Además es un potencializador del valor de las marcas del Fondo Nacional, que además recibe las regalías del caso. Hoy el Fondo Nacional está recibiendo en promedio mil millones de pesos cada trimestre por regalías, cuando en el pasado hacía lo contrario: pagaba porque pusieran el triangulito en los productos ciento por ciento Café de Colombia.
¿Cómo va la posibilidad de franquicias?
Acordémonos que la Federación vendía café verde.Y del negocio de tiendas, de canales, de productos terminados, poco o nada sabía. Sí había anaqueles y anaqueles de libros y de tratados.
Con esta experiencia que se ha tenido; con 170 tiendas en el mundo; más de 41 millones de personas que han pasado por las tiendas, ya aprendimos del negocio. Sabemos lo que el cliente está percibiendo y lo que está exigiendo. Entonces ya uno puede pensar en franquicias. Y efectivamente lo vamos a hacer. En principio franquicias corporativas. No personales. Corporativas. Lo vamos a hacer muy proximamente. Yo no pasaría más de tres meses del año siguiente. No veo porque nos tomemos realmente más tiempo.
MAURICIO GALINDO
EDITOR DE ECONOMÍA DE EL TIEMPO