La mnemotecnia es una de las pocas ciencias que estimula de manera simultánea y armoniosa ambos hemisferios cerebrales, según explica el padre Ramírez. El izquierdo lo desarrollan más los matemáticos, que son lógicos y analíticos y el derecho los artistas, los creativos. En mnemotecnia no se hace una diferenciación entre un hemisferio y el otro, y se trata de que se desarrollen de manera simultánea.
Además, con ella se estimula la atención, la concentración, la creatividad, la imaginación, se agiliza la memoria en el sentido porque uno aprende a memorizar a alta velocidad, gran precisión y larga durabilidad cualquier tipo de dato. "Solo como gimnasia mental es extraordinaria", dice el sacerdote.
La memoria es como una especie de músculo que hay que entrenar y ejercitar, en caso contrario se deteriora por falta de actividad. Según Ramírez, para que el método de la mnemotecnia se aplique bien se necesita que la persona sea muy creativa e imaginativa, pues una de sus ventajas es que impulsa el desarrollo de esos campos.
"Muchas personas de edad avanzada toman el curso para contrarrestar o prevenir un Alzheimer o un envejecimiento cerebral prematuro. También han participado estudiantes que han tenido accidentes automovilísticos y que han quedado con lesiones cerebrales graves y que la mnemotecnia, de cierta forma, les ha servido como parte de una terapia que les ayuda a recuperar parte de sus facultades mentales", agrega.
O simplemente personas que han comenzado a olvidar nombres, las llaves del carro o datos del cotidiano. "Muchos de estos olvidos se deben a fallas en la atención, en la concentración o porque no encuentran mecanismos para manejar toda la cantidad de datos que le dan diariamente el ejercicio profesional o universitario", agrega el padre.