Según la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (Anif), el ingreso disponible de los hogares colombianos luce algo presionado por las cargas financieras asociadas a los créditos de consumo e hipotecarios. Sin embargo, el gremio advierte que ese aumento no ha excedido aún el nivel del 25 al 30 por ciento de los ingresos de los usuarios de crédito. Anif señala que, de todas maneras, el aumento de la presión por las deudas viene generando un deterioro mayor de la calidad de la cartera bancaria, especialmente el crédito de consumo. Claramente, crecimientos del 30 al 40 por ciento real anual en los créditos de consumo no luce ni sostenible ni ordenado, dice el gremio. Agrega que los préstamos de consumo de los hogares se han incrementado del 40 al 74 por ciento del total del endeudamiento entre el 2002 y el 2007. Los análisis de comportamiento de las cosechas crediticias de la Superfinanciera vienen mostrando un deterioro creciente y en el caso de los créditos de consumo la cartera vencida ya bordea el 7 por ciento, dice Anif. Según sus análisis, la carga financiera de los hogares ha venido aumentando, al pasar de 3,6 por ciento en el 2006 al 5,2 por ciento en el 2007. Esa carga financiera se calcula como los pagos por intereses sobre el ingreso disponible. La mayor carga de los intereses está en créditos de consumo. En el 2007, por ejemplo, de la carga mencionada del 5,2 por ciento, 4,5 puntos correspondían al consumo y apenas 0,7 puntos al crédito hipotecario. Los colombianos pagan más intereses por tarjetas de crédito y otros tipos de financiación que por crédito de vivienda. 5,2 por ciento es la actual carga financiera de los hogares, medida como proporción del ingreso. WILABR
