Aunque el precio de la divisa estadounidense tuvo tres días de relativa estabilidad durante la semana anterior, la moneda estuvo a seis pesos el pasado jueves de alcanzar los $2.900 y el viernes terminó en $2.862.
Y ahora, en medio de los pronósticos que hacen algunos analistas de que una tasa de cambio por encima de $2.900 llegará pronto, el Banco de la República advirtió que la devaluación del peso frente al dólar “podría postergar la convergencia de la inflación a la meta (entre el 2 y el 4 por ciento)”.
Incluso, el Emisor dejó claro que “el descenso en los términos de intercambio tiene un efecto negativo sobre el ingreso nacional y explica en parte la fuerte devaluación del peso frente al dólar”.
Un factor que puede continuar presionando la tasa de cambio durante las semanas que vienen es que los precios del petróleo pueden seguir bajando. Tan solo durante julio han tenido una caída del 20 por ciento.
Pero más hacia el mediano plazo, la divisa seguirá a la espera de que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) realice una posible alza en los tipos de interés antes de que termine este año.
Por el lado del mercado local, la más reciente Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo y de la Bolsa de Valores de Colombia (BVC), mostró que los analistas del mercado local consultados prevén que la tasa de cambio durante los próximos tres meses oscilará en un rango de $2.600 y $2.800 como consecuencia de la actual incertidumbre.
“Para el cierre del 2015, se mantiene una gran dispersión en las respuestas. Es así como, el 50 por ciento de los analistas alrededor de la mediana considera que la tasa de cambio se ubicará en diciembre en el rango de $2.550 y $2.800, con $2.650 como respuesta mediana”, concluyen los resultados.