Los importadores colombianos y los industriales que usan materias primas para su producción, se están quedando sin opciones para impedir el aumento de los precios de los bienes al público, en la misma proporción en la que se ha devaluado el peso frente al dólar (21,34 por ciento en lo que va del año).
Esto significa que la valorización de la moneda estadounidense empezará a transmitirse en mayor proporción a los hogares colombianos, en los próximos meses.
Ayer, el dólar tuvo un aumento de $40,47, por lo que la Tasa Representativa del Mercado que rigue para hoy es de $2.902,98.
La advertencia de los empresarios coincide con lo señalado por el gerente del Banco de la República, José Darío Uribe, en su informe sobre inflación, quien afirmó que el dólar caro puede poner en riesgo la convergencia de la inflación a la meta del Emisor al cierre del año (ver recuadro).
CASOS CONCRETOS
Oliverio Enrique García, presidente de la Andemos (el gremio de los importadores de vehículos), señaló que a los futuros embarques de automotores que arriben al país sí se van a transmitir los efectos de las alzas de la moneda estadounidense. “Las marcas ya han ido ajustando precios”.
Muestra de esto último es que el fabricante alemán BMW ha asumido en estos tiempos de depreciación que una parte de este fenómeno se traslada al cliente y que otra la asume la compañía. El mensaje es que las decisiones de precios “no se toman al calor del alza del dólar”.
Y pese a que algunas marcas han asumido coberturas cambiarias para tratar de disminuir la incidencia del fenómeno, el gerente de Kia Colombia, Iván Peña, cree que con el dólar el precio de los vehículos seguirá con una tendencia al alza que conducirá a que el mercado de automotores en el país caiga este año entre un 12 por ciento y un 15 por ciento.
El presidente de la firma Arturo Calle, Carlos Arturo Calle, cree que el fenómeno de la devaluación termina reflejándose en los productos de esa marca, ya que la mayor parte de las materias primas empleadas son importadas. “Los precios aumentan no por voluntad de nosotros. Nuestro margen es muy pequeño. Lo que está pasando terminará afectando a todo el comercio”.
Asimismo, por el lado de las manufacturas, el presidente de la Asociación Colombiana de Industriales del Calzado, el Cuero y sus Manufacturas (Acicam), Luis Gustavo Flórez, contó que la compra a otras naciones de productos como cueros y herrajes sí ha tenido aumentos por cuenta del asunto cambiario. Aun así, señala, en el sector no se ven impactos de orden inflacionario.
En contraste, el gerente de Sodimac Colombia, Miguel Pardo, afirma que pese a tener un dólar de $2.900, la promesa de la marca a los clientes son los precios bajos. “Es indudable que a una empresa como la nuestra le impacte la subida del dólar”.
Por el lado de la fabricación de alimentos, la directora de la Cámara de Alimentos de la Andi, María Carolina Lorduy, señaló que la agroindustria colombiana que utiliza algunos insumos importados sí se vería obligada a efectuar incrementos en los precios al consumidor.
“Por la naturaleza de estos productos los empresarios amortiguan las subidas del dólar y las alzas de las materias primas en contra de sus utilidades para que estas no se reflejen en los precios”, concluyó la directiva.
Con miras a finales del 2015, expertos del mercado se han atrevido a pronosticar que la tasa de cambio llegaría sin problema a los $3.000. Sin embargo, la más reciente Encuesta de Opinión Financiera de Fedesarrollo y la BVC dejó claro que los analistas locales esperan que la divisa se mueva hacia el cierre del año entre $2.650 y los $2.800.
EL DÓLAR YA TOCÓ UN MÁXIMO DE $2.924,15
Durante la jornada anterior, la divisa estadounidense alcanzó una cotización máxima de $2.924,15 y un mínimo de $2.880.
Entretanto, la moneda estadounidense se negoció a un precio promedio de $2.902,98 en 1.227 operaciones en las que se transaron cerca de US$689 millones.
Según cifras de la Superfinanciera, el dólar está en precios que no se registraban desde mediados de enero del 2003. El precio máximo de la divisa ($2.968,88) se presentó en febrero de ese mismo año.
LA DEVALUACIÓN Y ‘EL NIÑO’ LE PASARÍAN FACTURA A LA INFLACIÓN
Durante la presentación del Informe de Inflación, el gerente del Banco de la República, José Darío Uribe, dejó claro que los indicadores de inflación básica han crecido durante los últimos nueve meses en parte por la transmisión de la depreciación de peso frente al dólar.
Uribe reiteró que aunque la inflación terminaría este año cerca del 4,5 por ciento, convergería hacia un 3 por ciento en los primeros meses del 2016.
Asimismo, el Informe señaló que “existe el riesgo de que la depreciación del peso y la persistencia de ‘El Niño’ posterguen la convergencia de la inflación a la meta de manera directa y por la activación de mecanismos de indexación”.
Por otro lado, el Gerente concluyó que para el 2016 el equipo técnico del Emisor pronosticó que el crecimiento de la economía colombiana estará un poco por encima del 3 por ciento.