Allí, la empresa deberá ejecutar el Plan de Obras e Inversiones diseñado por el Gobierno y la Superintendencia de Servicios Públicos, lo que demandará una inversión de 53.000 millones de pesos, que culminará en el 2015.
El objetivo es hacer inversiones prioritarias en el corto plazo para mejorar la cobertura y la confiabilidad de los servicios y, en consideración a las condiciones socioeconómicas de la población, apoyar las finanzas de la propia capital chocoana.
Por ello, se requieren 44.548 millones de pesos para acueducto y alcantarillado y 7.700 millones para acometidas. EPM aspira a que en el 2014 la cobertura en acueducto llegue a 76 por ciento y en alcantarillado, a 73.6 por ciento.
En Quibdó (Chocó), los habitantes carecen de agua potable y solo les llega durante dos horas diarias. Además, las redes de acueducto y alcantarillado del centro están rotas, lo que genera graves problemas de contaminación.