La medida, además, permitirá que el empleado también se inscriba a la Caja. Para ello, el afiliado deberá pagar cerca de 15 euros al año. Entre los servicios que brinda el acuerdo, están: salud general y específica, educación, programas de capacitación para los jóvenes y farmacias y supermercados, sin necesidad de estar vinculado a una empresa colombiana.
La idea es, según afirmó el promotor de desarrollo de Aesco, Juan Pedro Rodríguez, que esa parte de la familia que permanece en el país de origen pueda disfrutar de un acompañamiento integral, ya que las coberturas que ofrece el aparato nacional de salud y educación son muy básicas.
Las cajas son entes que buscan el equilibrio entre el trabajador y la patronal, gobernadas por trabajadores y empresarios en igualdad de representación en sus juntas directivas y con independencia económica.