La Superintendencia de Sociedade y el Ministerio de Agricultura pusieron ‘en cintura’ a los fondos ganaderos del país, luego de las denuncias que se han revelado en los últimos meses.
En primer lugar, se hará una reorganización total del Fondo Ganadero del Meta, aplicando las facultades y los procedimientos señalados en la Ley 1116.
Los pasivos de esta entidad suman 1.500 millones de pesos y registra una pérdida acumulada (a 31 de diciembre de 2010) de 4.000 millones de pesos.
Otra de las decisiones tomadas en la tarde de ayer tiene que ver con la vigilancia especial a la que someterán a los fondos que tienen problemas de tipo financiero.
A estas entidades se les harán visitas precautelativas para verificar que los bienes de estas entidades están utilizándose como corresponde.
En tercer lugar, se dispuso que las participaciones accionarias que tiene el Gobierno en los fondos (que son minoritarias), serán centralizadas en una fiducia.
Con esta medida el Gobierno Nacional busca salvar sus intereses y los de los fondos.
La cuarta medida tomada por el Ministerio y la Supersociedades está relacionada con la redacción de un proyecto de Ley para modificar las normas que rigen a los fondos ganaderos.
“Esas modificaciones –explicó el ministro de Agricultura, Juan Camilo Restrepo– cobijarán tres aspectos:.
“Se redefinirá el objeto social de los fondos, se abrirá el abanico para que puedan tener objetos sociales más amplios y se permitirá que puedan actuar como entidades prestadoras de asistencia técnica a los ganaderos”.