Tres decisiones se cocinan en la oficina del ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Gabriel Vallejo. Esta semana, el presidente Juan Manuel Santos ya adelantó una de ellas: la agilización de los trámites ante la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales, Anla, mediante la instalación de procesos orales. Pero la medida va más allá, según explicó Vallejo, se hará una reestructuración organizacional en la institución para poder hacer más eficientes los trámites.
Pero, además, el Ministro anunció que está estudiando de qué manera aumentar la participación del Gobierno central en las Corporaciones Autónomas Regionales, CAR, y aseguró que la decisión sobre la delimitación de Santurbán ya está definida.
¿Cómo le ha ido con la gestión de los 200 mil millones adicionales que busca en el presupuesto para el Ministerio?
Hemos tenido toda la receptividad por parte del Ministro de Hacienda, pero somos conscientes de que son más las necesidades nacionales que los recursos disponibles. Nos hemos reunido ya con el Ministro y la Viceministra, estuvimos en el Congreso solicitando casi 220 mil millones adicionales de los 530 mil que tenemos aprobados. Pero también estamos gestionando recursos internacionales, tenemos un plan de acción para atraer recursos, gran parte de ellos están enfocados en los cinco institutos que tiene el Ministerio a cargo, entre estos el Ideam.
¿Eso quiere decir que probablemente no les logren aprobar todo lo que esperan?
Yo creo que con lo que el Gobierno nos va a acompañar de manera adicional -no tenemos la cifra aún-, más los recursos complementarios adicionales, vamos a tener un resultado muy positivo.
En cuanto a las corporaciones ambientales, ¿hay alguna propuesta para reformarlas?
Las corporaciones son instituciones con muy mala imagen, pero, como todo en la vida, hay unas espectaculares, otras menos buenas. Lo que necesitan es acompañamiento, por eso a la primera semana de ingresar al Ministerio tomé la decisión de traer los 33 directores a trabajar una semana completa y, lo más importante, me comprometí a tratar de participar en todos los consejos directivos. Pero la otra parte tiene que ver con el fortalecimiento institucional. Yo creo que a mediano plazo hay que hacer un ajuste, especialmente, en la estructura de las juntas directivas, que haya un mayor fortalecimiento del Ministerio dentro de las juntas.
¿Pero ese cambio en las juntas requerirá ajustes de qué tipo?
Legal, porque la constitución política enuncia cómo es la estructura de las CAR. Estamos mirando cómo sería el mecanismo, no se trata de ir a revolcar, sino de que el Ministerio tenga mayor participación.
También han anunciado un cambio en el tema de licencias ambientales, ¿en qué consiste?
Llevamos años en los que todo el mundo se queja de la lentitud de la Anla, por la razón que sea. Este decreto busca una sola cosa: agilidad. Piense en los pasaportes, hace quince años se demoraba un mes, hoy se lo entregan en horas, lo que vamos hacer en la Anla es exactamente lo mismo, sin perder el rigor.
¿Cómo se agiliza el proceso con el mismo personal?
Y quién ha dicho que va a ser el mismo personal.
Entonces, ¿dónde están los recursos adicionales de la Anla para esto?
Nosotros acabamos de contratar a una de las personas que más sabe de reestructuraciones organizacionales. Porque es un tema de procesos, que no necesariamente se solucionan con más gente, sino con diseños más eficientes.
¿Cómo funciona la oralidad para las licencias?
Hoy, la empresa viene y me dice: “yo quiero explorar o explotar en tal sitio”, la autoridad les pide unos requisitos, se hace una visita técnica y en algún punto la empresa va a la autoridad con los documentos que le pidieron. Suele pasar que allí le dicen, por ejemplo, “le hacen falta diez papeles”, entonces el empresario los busca, regresa a la autoridad y le dicen: “Estuve volviendo a revisar y resulta que necesita otros papeles” y así hay procesos que tardan seis años.
Con la licencia oral le vamos a decir de una vez al empresario qué es lo que necesita para tramitar la licencia en el momento en que presenta la solicitud. También vamos a hacer una intervención gerencial muy grande, que va a implicar posiblemente más gente y que probablemente es algo que tendremos que solucionar a futuro. Por ahora, tenemos que tener el decreto.
¿Usted puede garantizar que con esta medida se mantendrá la rigurosidad en el estudio de las propuestas?
De eso no me cabe absolutamente la menor duda. Vamos a volver más eficiente el proceso con unos niveles de rigor muy claros.
Y ya está claro cómo se va a dar esta restructuración, ¿es necesario un decreto para hacer esto?
Es un rediseño institucional; ya llevamos dos semanas trabajando informalmente con el consultor.
¿Y requiere alguna ley?
No, porque vamos a hacer un proceso interno de acompañamiento y ajuste. Pero el cambio no es crear un subdirector o un nuevo cargo, sino mirar qué queremos y para esto qué hay que hacer.
SOLUCIÓN PARA SANTURBÁN
Con respecto a Santurbán, ¿ya hay alguna solución a la vista?
Sí, ya está.
¿Y puede adelantar algo?
No, pero está en la recta final.
¿Este año se podrá tener definición?
Sí. Eso sí lo puedo decir.
Pero eso ya lo han dicho antes...
Pero yo llevo tres semanas y media y quiero sentirme tranquilo con la decisión que tome. Porque no es algo que se despacha y listo. Es una decisión que usted toma y al día siguiente lo llama el Contralor, el Fiscal y vienen las demandas.
Lo que sí le garantizo es que le estamos poniendo el alma a esto y que hemos puesto todas las variables sobre la mesa.
Nohora Celedón
nohcel@portafolio.co