Esto, a pesar de que las estadísticas de lecturabilidad entre los colombianos no marchan en la misma dinámica.
Los índices de lecturabilidad en el país son aún muy bajos. En promedio, un colombiano lee al año 1,6 libros, mientras que un argentino lee 3,2 libros; un mexicano, 2,5, y un español 7,7 libros por año.
La Feria dejó expectativas de negocios a un año por 28,5 millones de dólares, gracias a la participación de 154 compradores internacionales. Las ventas spot fueron por 9,7 millones de dólares, de las cuales el 48,7 por ciento correspondieron a México y el 28 por ciento fueron compras de empresarios de Ecuador.
Según datos de la Cámara Colombiana del Libro, el mercado del libro le reporta a la economía nacional ingresos anuales cercanos al billón de pesos. Según Moisés Melo, presidente de este organismo, es una cifra que debe tener un crecimiento del 10 por ciento por temporada.
"Soy optimista con el desarrollo de la industria editorial en Colombia. La asistencia a la Feria no es un fenómeno aislado. Se incrementa el interés por el libro, y eso lo reporta cada empresa editorial participante, satisfecha por los resultados logrados", señala Melo.
El mismo optimismo lo comparte Richard Uribe, del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (Cerlalc). "Comparados con otros países de la región, Colombia mantiene buen ritmo. La cifra de 186 millones de dólares exportados en el 2007 es muy significativa, porque acá la oferta es de productos editoriales y gráficos, y esto deja al país como el principal exportador de la región", afirma Uribe.
Colombia exporta a Panamá unos 11 millones de libros, es decir que este país nos compra cerca de 2,5 millones de dólares en textos. Estados Unidos es el principal destino de los textos editados en Colombia, que en su mayoría son de literatura y escolares.
"El colombiano compra libros decorativos, de arte, de regalo, de superación personal, pero consumimos poco libro de literatura o académico", sostiene Alberto Sánchez, director comercial de Editorial Planeta.
Por su parte, las editoriales siguen buscando nuevos autores, para invadir el mercado de novedades a la espera de algún 'best seller' que genere utilidades y mantenga la dinámica de producción.