Hay que tener en cuenta, además, que nunca antes este índice (que comenzó a elaborarse en 1997 con un método común en toda la UE) se había posicionado en números negativos.
En España, donde la inflación se sitúa en cifras negativas desde hace meses, el indicador avanzado difundido ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) también volvió a acelerar su caída, hasta el -1 por ciento en septiembre. En agosto, sin embargo, el indicador en España había moderado su descenso, al pasar del -1,4 por ciento de julio (mínimo histórico) al -0,8 por ciento.
Si se confirman los datos, el diferencial de inflación de España con sus socios del euro se situaría en siete décimas.
Eurostat publicará el dato definitivo del Ipca correspondiente a septiembre, con información detallada sobre su composición y por países, el próximo 15 de octubre.
El primer cálculo se efectúa a partir de los datos adelantados en algunos países del área, así como de información preliminar sobre la evolución del precio de la energía.
La oficina estadística, con sede en Luxemburgo, resalta que este método de cálculo es fiable, ya que en los últimos dos años ha coincidido en 18 ocasiones con el dato definitivo.
