Enrique García, presidente ejecutivo de esa entidad, explicó que "los problemas sociales de acceso a servicios como salud, educación y financieros, también pueden y deben ser atendidos por el sector privado".
Por ello, añadió, la CAF apoya las iniciativas privadas de negocios que contribuyan a solucionar estos problemas, "como una forma económicamente eficiente de lograr crecimiento económico con
equidad".
Agregó que "esta participación patrimonial tiene el objetivo de
impulsar el desarrollo de las microfinanzas latinoamericanas y
fortalecer el vínculo comercial entre nuestra región y Europa".
La corporación apoya en la actualidad a unas cuarenta instituciones que atienden a la microempresa en once países latinoamericanos, con recursos totales que superan los 120 millones de dólares.
El Fondo, que tiene entre sus principales promotores al Banco
Bilbao Vizcaya Argentaria SA (BBVA) y la fundación Codespa, se creó "con el objeto de contribuir al desarrollo de la industria de las
microfinanzas".
Ello, "mediante la inversión en instrumentos de deuda emitidos
por instituciones microfinancieras latinoamericanas que demuestren solidez y viabilidad hacia la sostenibilidad", explicó.
La financiación en moneda local reduce "el riesgo mediante la
diversificación de las inversiones por plazos, países y divisas",
aunque "también financia en valores denominados en euros o en
dólares", añadió.
La CAF es una institución financiera multilateral en la que participan 15 bancos privados y que apoya la integración y el desarrollo en cada uno de los países asociados.
Los países que la conforman son Colombia, Argentina, Bolivia, Brasil, Costa Rica, Chile, Ecuador, España, Jamaica,
México, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Trinidad y Tobago, Uruguay y Venezuela.