Las presuntas incomodidades y fallas que van en contra de la accesibilidad y seguridad para los viajeros en los aeropuertos de Valledupar, Bucaramanga y Cúcuta, que actualmente están en remodelación, llevaron a la Superintendencia de Puertos y Transporte a abrirle una investigación administrativa al Concesionario Aeropuertos de Oriente, encargado de las obras, mantenimiento y administración de esos terminales.
La medida le fue notificada el miércoles a la empresa, que tiene 10 días para contestar los requerimientos.
La Supertransporte ya había instaurado una acción de cumplimiento contra la misma empresa por los basureros que se encuentran cerca a las instalaciones aéreas.
De acuerdo con un documento que conoció Portafolio, esta vez, la decisión de emprender un proceso administrativo, que podría conllevar a sanciones, tiene origen en denuncias de viajeros afectados e inspecciones.
En cada terminal se señalan anomalías específicas. Con relación a los aeropuertos Palonegro, de Bucaramanga, y Camilo Daza, de Cúcuta, la Súper admite adelantos en los trabajos de modernización, pero anota que, al parecer, Aeropuertos de Oriente incumplió con su compromiso de entregar las obras terminadas el pasado 26 de diciembre, lo que habría afectado el servicio. Además, funcionarios constataron que, en los dos casos, no hay una señalización que identifique las áreas para el tránsito de pasajeros y las de operaciones.
Así mismo, asegura que habría menos sillas de las requeridas y no poseen rampas para el acceso de personas con movilidad reducida.
Pero tal vez lo más grave es que la pista del Camilo Daza, según el informe, presenta un aparente deterioro, incluso con grietas. Y se advirtió también sobre una posible contaminación por fluidos, debido a que allí se les hace mantenimiento a helicópteros.
Estas fallas, según afirma la Súper, podrían evidenciar falta de planeación de las obras de modernización.
“El presunto incumplimiento genera una situación contraria a las normas que regulan la prestación del servicio público de transporte, en cuanto a las condiciones de seguridad óptimas para los usuarios de los aeropuertos”, dijo el superintendente de Puertos y Transporte, Juan Miguel Durán.
Con relación al Alfonso López Pumarejo, de Valledupar, la investigación tiene que ver con la supuesta mala calidad de los accesos para discapacitados y la “aparente inexistencia de servicios de ventilación en las áreas de locales comerciales que venden alimentos”. El documento también señala presuntas deficiencias en la silletería y el aire acondicionado de las salas de espera, así como las escasas vías de acceso para la salida y entrada de pasajeros.
‘LAS OBRAS SE ESTÁN HACIENDO'
Aeropuertos de Oriente dijo que las obras no tienen una fecha única de entrega y se están haciendo; además, que esta es una responsabilidad compartida con la Aerocivil. Anotó que sí hay accesos para discapacitados, la señalización se está completando y que las sillas corresponden a lo estipulado en el contrato. Sobre la pista del Camilo Daza, indicó que no es su responsabilidad.
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