Con dos piscinas, una pared para escalar, un lujoso teatro y cabinas para 2.000 pasajeros, el Rhapsody of the Seas es el crucero más grande que ha ofrecido viajes de ida y vuelta desde Hong Kong. Mientras estuvo anclado allí, este coloso de 11 pisos tentó a los nuevos ricos de Asia a probar un pasatiempo de lujo al estilo occi dental, y su dueño, Royal Caribbean Cruises Ltd., espera que su nuevo puerto, en Shanghai, tenga el mismo éxito.
Aunque Asia representó sólo el 5% del mercado mundial de cruceros el año pasado, el número de asiáticos tomando cruceros aumentará para 2010 a 1,5 millones de pasajeros al año, un incremento del 40% con respecto a 2005, según una predicción de Ocean Shipping Consultants Ltd., una consultora del sector.
El motor del crecimiento es el aumento de los salarios, especialmente en China. El número de chinos que toma cruceros
solamente desde Hong Kong creció más del doble, de 201.000 en 2005 a 459.000 el año pasado, según la Comisión de Turismo de Hong Kong. "Todos han puesto la mira en esta parte de la torta," dice Michael Goh, vicepresidente de ventas y marketing de Star Cruises Ltd. de Malasia, la tercera compañía de cruceros más grande del mundo en términos de pasajeros, ingresos y tamaño de la fl ota. Mientras las líneas de cruceros tratan de buscar su lugar en este mercado, puertos asiáticos desde Shanghai a Singapur están construyendo terminales de pasajeros para atender la demanda.
Los operadores de cruceros dicen que su mayor desafío en China es tratar de convencer a posibles clientes de que un crucero no es solamente un modo de transporte. También tienen otro asunto que resolver en el territorio especial de Hong Kong, donde los pasajeros en su mayor parte navegaban hacia aguas internacionales sólo para apostar.
Star Cruises todavía ofrece un viaje de un día al Mar de la China Meridional, pero ahora no hace tanto hincapié en sus casinos. En su lugar de eso, la compañía promueve sesiones de karaoke familiar y toboganes acuáticos, ya que los asiáticos llevan a sus hijos en los cruceros más a menudo que los europeos o norteamericanos. Al mismo tiempo, Star Cruises trata de atraer a adultos con eventos como fi estas al estilo mexicano con "tequila vigorizante", como describe su página de Internet.
Viajes a la medida Royal Caribbean, el segundo operador del mundo, ha adaptado el Rhapsody of the Seas para el mercado asiático con shows de acróbatas y magos, los cuales no necesitan de un idioma en común para que sean entendidos.
Además, Royal Caribbean y otras compañías ofrecen viajes
más cortos, ya que los asiáticos en general reciben menos días
de vacaciones que los pasajeros occidentales. En Asia, un crucero
típico dura entre cinco y siete días solamente.
"Si trata de ofrecer algo de más de siete días, está muerto. No hay mercado", dice Massimo Brancaleoni, vicepresidente de operaciones en Asia de Costa Crociere SpA, una compañía de Génova, Italia, que forma parte de Carnival Corp., el mayor operador de cruceros del mundo.
Las líneas de cruceros todavía están tratando de aprender cómo satisfacer a sus clientes en Asia. Kelvin Tan, el director de desarrollo empresarial de Royal Caribbean para la región Asia-Pacífico, dice que sus cruceros apuntan a ser "muy acogedores para las familias", con actividades como una "noche de piratas" para los más chicos y, para los adultos, actividades como clases de cocina, servicios de spa, torneos de pingpong y eventos para solteros.
Para agosto, Shanghai espera inaugurar una terminal de cruceros
cerca del distrito histórico del centro de la ciudad para acomodar
a un millón de pasajeros por año. Ésta será una de las terminales más inusuales de Asia, una burbuja de vidrio de tres pisos que se ve "como un OVNI", dice Helen Huang, subgerente general de relaciones corporativas en Shanghai International Port (Group) Co., el principal desarrollador del proyecto de US$100 millones. Singapur planea construir una terminal de cruceros para 2010, y Hong Kong espera inaugurar una para 2012.