Luego de 59 años de fundado, con varios problemas económicos encima y con un exdirectivo en la cárcel, el Fondo Ganadero del Meta le solicitó a la Superintendencia de Sociedades su liquidación judicial, entidad que ya inició el proceso.
“La sociedad Fondo Ganadero del Meta ha quedado disuelta”, dijo la Super en un comunicado.
La decisión la tomó el representante legal de la sociedad, Néstor Martínez, luego de haberse concertado en la asamblea de accionistas de la entidad.
Los problemas económicos del Fondo comenzaron en la llamada ‘zona de despeje’, donde la guerrilla robó 6.609 reses, propiedad de la empresa hacia finales del siglo pasado. Por este caso, la Nación fue condenada a pagar 8.000 millones de pesos, 15 años después.
En segundo lugar, se denunciaron varias acciones dolosas en contra de la empresa. Las dos situaciones anotadas le ocasionaron un detrimento patrimonial de más de 10.000 millones de pesos.
En sus mejores épocas, el Fondo llegó a tener un inventario de más de 18.000 reses.
Otra de las situaciones que llevaron a la liquidación estuvo en el permanente ‘agarrón’ entre el Fondo y el Comité de Ganaderos del Meta, situación que llevó a torpedear las acciones de los unos en contra de los otros, mientras que muchos dirigentes aprovecharon al Fondo para sus intereses personales.
Hace diez años, en el 2005, puso en marcha un proceso de renovación de las actividades del Fondo, pero estas no dieron resultado.