Así entra un tercero al debate de actualidad en la caficultura, pues mientras el Ministro de Agricultura y la llamada Comisión de Ajuste del Sector Cafetero han recomendado que se hagan este tipo de siembras, la Federación ha dicho que sí, pero no contra los recursos que maneja el gremio o la investigación de Cenicafé.
El representante de la OIC destacó la estrategia de Colombia en diferenciar su café con calidad, es decir, con la que da el café suave arábica lavado.
Oliveira Silva también llamó a los productores y al gremio cafetero a negociar un nuevo ‘pacto cafetero mundial’, esta vez no con cuotas de exportación, sino sellando negocios directamente con compradores como las empresas de alimentos y los tostadores. Esto, en busca de mejores precios frente a los actuales que se registran en el mercado.
Acerca de los precios del grano, destacó que es una cadena en la que todos pierden. En primer lugar, los caficultores, que no invertirían en sus cultivos, con lo que se generan cosechas de calidad inferior y pierden la capacidad de cumplir con las obligaciones financieras.
Pierde también la industria torrefactora, pues (inicialmente) puede beneficiarse con más ganancias, pero no tendría seguridad por la oferta futura.
Por otra parte, el dirigente cafetero terció en otro debate, la institucionalidad cafetera, que ha recibido críticas de Dignidad Cafetera, del Ministro de Agricultura y de la Comisión de Ajuste. “La Federación, única en su género, combina la visión empresarial y la representación gremial con una búsqueda de beneficios para los cafeteros y sus familias”, concluyó.