Para acelerar la desintegración de camiones y agilizar así la modernización del parque automotor de carga, los transportadores le proponen al Gobierno exportar la chatarra que queda de la desintegración vehicular.
“Esa chatarra tiene un valor, ¿por qué no la vendemos? Eso alimentaría un fondo que permita modernizar más rápido el parque”, le dijo a Portafolio Juan Carlos Rodríguez, presidente de Colfecar.
Esos recursos, sugiere el dirigente gremial, los manejaría una fiducia, papel que está desempeñando hoy el Ministerio de Hacienda.
Agrega que también viene siendo hora para que se defina un criterio de vida útil. Según el Ministerio de Transporte, en el país hay aproximadamente 315.000 vehículos de carga, de los cuales el 80 por cierto son de uso público.
Asecarga, otro gremio de empresas de transporte, calcula que al fijarle vida útil a los camiones saldrían del mercado alrededor de 56.000 unidades, de modelos ochenta hacia abajo.
Jorge Carrillo, coordinador del grupo de reposición integral de vehículos del Mintransporte, asegura que este año se podría llegar a chatarrizar 5.000 vehículos, ya van 2.000.
Esto sin embargo, no ayudaría a bajar la sobreoferta de camiones, pues pocos transportadores, una vez desintegran su camión viejo, están vendiéndole al Gobierno el cupo.
chrpar@eltiempo.com