Luego del anuncio del Gobierno de subir a 5 billones el precio base para privatizar a la generadora Isagen, el país quedó a la espera de la largada del proceso, mientras la controversia crece.
Pese al aumento del precio para la venta del 57,66 por ciento de la propiedad, en manos de la Nación, sigue el debate de quienes consideran que se ofrece a uno bajo, así como por el rechazo a los límites puestos a la participación del sector solidario, trabajadores y fondos de pensiones.
La semana pasada, 436 trabajadores, extrabajadores y pensionados de Isagen presentaron ante la sección primera del Consejo de Estado una demanda de nulidad contra la decisión del Gobierno de limitar la participación del sector solidario, que aún no ha sido admitida.
Tras el aumento del precio base que ordenó el Consejo de Ministros a 3.178 pesos por acción, el título fue el que más subió ayer en la Bolsa de Colombia, al avanzar 6,68 por ciento y cerrar en 3.115 pesos.
Entre tanto, el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, dijo que el proceso comenzará lo más pronto posible, con un decreto que oficializa el nuevo precio de venta.
“Es un proceso que cogió una dinámica y un ritmo que lo hacen irreversible”, aseguró.
Los demandantes, conocidos como Dueños de Isagen, apuntan a que se les permita aspirar a un porcentaje superior al 6 por ciento (más de 520.000 millones de pesos), para lo cual accederían a créditos respaldados con las acciones.
Este litigio se suma a la acción popular interpuesta por el expresidente Álvaro Uribe.
Si bien el Gobierno está más tranquilo con el nuevo precio base, los 5 billones de pesos siguen siendo inferiores a la valoración realizada por los expertos Ricardo Rodríguez Yee (exdirector de la Upme, que se menciona para el Viceministerio de Energía) y Lina Marcela Montoya, quienes, con base en información del Grupo Bancolombia, valoraron en 5,85 billones de pesos la participación estatal en Isagen.
El ministro Cárdenas también dijo que, tras un análisis de las empresas que podrían venderse, se concluyó que Ecopetrol tiene un gran potencial de valorización e ISA está cambiando de estrategia, por lo cual no es momento oportuno para venderlas.
En cambio, Isagen no va a poder crecer a tasas muy altas si no se le inyecta capital. “Tiene un endeudamiento muy alto. En diciembre pidió una capitalización y el Gobierno no tiene los recursos para hacerlo”, subrayó.
El plan del Gobierno es destinar el 10 por ciento de la venta de la generadora a las cuenta del Fonpet de las regiones donde opera Isagen (Antioquia, Santander, Tolima y Caldas).
Entre tanto, en el mercado bursátil hubo posiciones opuestas. Juan David Ballén, analista de Alianza Valores, afirmó que se despejó el panorama del proceso, pues no había mucha información y se sentía que avanzaba lentamente, pero que los últimos anuncios generan confianza y envían el mensaje de que la venta sigue en pie y que se realizará en los próximos meses.
Sin embargo, Juan Pablo Muñoz, analista de Asesorías e Inversiones, no ve el horizonte tan despejado, ya que los procesos jurídicos siguen vigentes.
El Ministro de Hacienda sostuvo que la venta al sector solidario tomará dos meses y reconoció que la enajenación del control se podría extender hasta el 2014.
