Las declaraciones las hizo este martes ante una comisión mixta de economía en el Congreso de su país.
Por otra parte, esta demanda final podría "estar sostenida por la reactivación presupuestaria y monetaria", indicó Bernanke, aludiendo al plan de reactivación presupuestaria de 787.000 millones de dólares en tres años aprobado a mediados de febrero y a los centenares de miles de millones de dólares invertidos por la Fed para reactivar la economía.
Pese a ello, los mercados financieros continúan sometidos a una "tensión considerable", y su eventual recaída podría matar la recuperación en su origen, advirtió el jefe de la Fed.
"Las empresas deberían ser prudentes en sus contrataciones" de personal y "la tasa de desempleo podría en consecuencia mantenerse elevada durante cierto tiempo, incluso luego de que la economía se recupere", insistió Bernanke.
"En esas condiciones, prevemos que la inflación se mantenga débil", agregó.
El presidente de la Fed se pronunció sobre los datos que deben ser divulgados el jueves sobre los "tests de resistencia" impuestos a las instituciones que controlan más de 100.000 millones de dólares en activos, y evaluarán la salud de estos bancos y su capacidad a resistir un agravamiento de la recesión.
Sobre los 19 grandes bancos estadounidenses testeados por el gobierno, una gran parte de ellos "serán capaces de satisfacer sus necesidades de fondos sin capitales suplementarios del Estado", estimó Bernanke.
Según Bernanke, estos bancos podrán salir de esta situación recurriendo al mercado o vendiendo activos. También señaló que algunos podrían aceptar convertir en acciones comunes los títulos híbridos emitidos en beneficio del Estado u otros accionistas.