La Refinería de Cartagena, la segunda más grande de Colombia, entraría en operación entre octubre y noviembre, pero solo alcanzaría su máxima capacidad cinco meses después, dijo el miércoles un directivo de Ecopetrol.
La entrada en operación de la refinería ha sido incorporada por analistas y autoridades económicas como un factor dinamizador dentro de sus pronósticos de crecimiento de la economía, en momentos en los que las expectativas han mostrado un deterioro.
“Ya estamos en la fase final de la construcción y vamos al 30 por ciento de las actividades de precomisionamiento, comisionamiento y arranque”, dijo Pedro Rosales, vicepresidente de Refinación y Procesos Industriales de Ecopetrol, en una conferencia telefónica con inversionistas.
“Esas actividades deberán estar permitiendo que se arranque la operación de la refinería hacia octubre o noviembre de este año”, precisó.
Rosales había proyectado en marzo que la refinería -que ha requerido inversiones por más de 6.400 millones de dólares- estaría funcionando en el segundo semestre del año, sin precisar un mes específico.
El directivo explicó que el inicio de la operación será gradual, a medida que se incremente la carga de cada una de las 31 plantas de refinación.
“Es un proceso que hay que llevar muy cuidadosamente por temas de seguridad y eficiencia y el proceso completo puede tomar entre 3 y 5 meses después del inicio de la operación”, afirmó.
Una vez concluya el proyecto de modernización, la refinería quedará con una capacidad de carga de 165.000 barriles diarios, desde los 80.000 barriles por día en el pasado.
El codirector del Banco Central colombiano, Adolfo Meisel, estimó el miércoles en que la cuarta economía de América Latina crecería al menos un 3,5 por ciento este año, alentada por la entrada en operación de la Refinería de Cartagena, así como por una recuperación de los ingresos por exportaciones y un mayor consumo de producción local.
Reuters