La lluvia de críticas que ha caído sobre la reforma tributaria del 2012 llevó al senador Antonio Guerra a hacer un corte de cuentas a la Ley, a pocos meses de cumplir un año.
Si bien el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, dijo que aún era prematuro para ver los efectos, el director de la Dian, Juan Ricardo Ortega, explicó que “la reforma está dando un crecimiento del 7 por ciento en términos nominales, en recaudo”.
Esta cifra se sustenta en el recaudo a septiembre, de 81,9 billones de pesos, frente a los 76 que se llevaban el año pasado.
El impuesto de renta y el nuevo, conocido como Cree, según Ortega, pasaron de 37 a 40,3 billones.
El funcionario aceptó que hubo una caída de 2 billones en el iva porque se tomó una medida para “sacar la plata de donde hay que sacarla y en el momento adecuado”.
Esto significa que a los pequeños empresarios se les dio un alivio en retención en la fuente, donde se les estaba reteniendo un 50 por ciento que no les dejaba caja, indicó Ortega.
Cárdenas resolvió un sinnúmero de inquietudes de los congresistas, entre ellas la que planteó que se han perdido más de 500 mil empleos por la reforma.
“Hoy somos cabeza de grupo en generación de empleo en América Latina. En el país, el empleo creció 10 por ciento entre 2010 y 2013, frente al aumento de 7,4 por ciento en Chile y de 5,4 en México”.
Anunció que la retención en la fuente por compras bajará de 3,5 a 2,5 por ciento, lo que dará otro alivio a las empresas.