Este jueves se conoció la renuncia del gerente de Aguas de Bogotá, Ricardo Agudelo. La dimisión se presenta luego de que EL TIEMPO revelara el pésimo manejo de la nueva flota de compactadores, adquirida por la Empresa de Acueducto, Alcantarillado y Aseo de Bogotá (EAB) y entregada a Aguas de Bogotá entre abril y junio del 2013, al punto que a cuatro de los vehículos ya les habían fundido el motor.
Según conoció este diario, de los 205 compactadores adquiridos, 64 deben entrar ahora a reparación. Unos 30 porque, pese a completar hasta nueve meses de uso y con más de 8.000 kilómetros de recorrido, siguieron sin hacérseles el mantenimiento preventivo exigido.
Pero lo que encendió las alarmas fue que el mal uso de los compactadores ocasionó que a cuatro de los vehículos se les fundiera el motor sin haber completado siquiera los 10.000 kilómetros de recorrido.
La Empresa Aguas de Bogotá, además, entrará a un proceso de reestructuración. Este es el operador público que hoy cubre el 52 por ciento de la recolección de basuras en Bogotá.
REDACCIÓN BOGOTÁ