Los ojos del mundo están puestos sobre Colombia. El grado de inversión entregado al país en forma unánime por parte de tres de las más importantes calificadoras, más el crecimiento de la economía en el trimestre, de 5,1 por ciento, por encima de lo proyectado, están teniendo sus primeros efectos, tanto interna como externamente. Por una parte, los analistas revisan al alza sus estimados acerca de lo que será el PIB del segundo trimestre y de todo el año. Ayer, el Centro de Estudios Económicos Anif aumentó su pronóstico: "Existe sustento empírico para esperar una expansión en el rango 4,75 por ciento a 5,25 por ciento, con punto medio del 5 por ciento anual durante este segundo trimestre de 2011". Anif reconoce que habían pronosticado un primer trimestre en 4,5 por ciento, pero la cifra observada inclusive rebasó el techo que teníamos, que era de 4,75 por ciento". Por el lado del Gobierno, el ministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, puso en alto relieve el impacto que tendrá el país con la calificación de grado de inversión y asegura que las perspectivas son favorables, pero siguen en un estimativo de 5 por ciento. El crecimiento negativo de la construcción le restó al índice total, pero este sector tiene buenas perspectivas de ahora en adelante, por lo que su aporte en el otro trimestre puede ser al contrario, en especial en el tema de las obras públicas. Otras firmas analistas, como Interbolsa, estiman que en el año, el país podría crecer 5,4 por ciento, previendo que minería y comercio sigan liderando la productividad y se les sume el transporte. Para el Bancolombia, la proyección estimada para el año sigue en 4,8 por ciento, aunque no desconocen que el segundo trimestre puede ser mejor.
