El ministro de Salud, Alejandro Gaviria, dice que hay que resolver la crisis financiera del sector.
Hay reportes diferentes sobre la situación del sector de la salud. ¿Cuál es su visión al respecto?
La situación ha mejorado ostensiblemente: alcanzamos la cobertura universal, igualamos los planes de beneficios, actualizamos integralmente el POS, controlamos los precios de los medicamentos, hemos avanzado, con el giro directo, la compra de cartera y otras medidas.
En la solución de los problemas financieros del sistema, tenemos uno de los mejores esquemas de vacunación del mundo en desarrollo y tenemos una nueva Ley Estatutaria que, entre otras cosas, consagra la salud como derecho fundamental.
¿Quiere decir eso que la crisis empieza a solucionarse?
Así es. Está quedando atrás. Todavía hay muchos desafíos pendientes, pero la recuperación del sector es innegable.
¿Qué falta para que la situación mejore todavía más?
Falta acabar de resolver la crisis financiera, darle una solución definitiva a los problemas de Saludcoop y Caprecom y recuperar la confianza pública en el sector.
Así mismo, debemos seguir en la ruta de mejoramiento gradual basada en decretos y reglamentaciones.
¿A qué atribuye que la mayoría de los colombianos, según las encuestas, afirma que la situación de la salud va por mal camino?
Hay una suerte de paradoja al respecto.
Cuando a la gente le preguntan sobre su última experiencia con el sistema, tiende a evaluarlo bien; cuando le preguntan sobre el sistema en general, es mucho más pesimista.
Pesan mucho los reportes de prensa y los juicios impresionistas. Creo, además, que nos ha faltado vehemencia a la hora de presentar y defender los logros.
Después de haber logrado sacar adelante la Ley Estatutaria del sector, un proyecto de ley ordinaria fracasó. ¿Qué tan grave es el hundimiento de la iniciativa?
No es grave. Creo que ya no se necesita una reforma a la salud, entendida como una gran reforma legal.
Si el tema es subsanable a partir de decretos, ¿qué les hizo cambiar de posición después de haber defendido el proyecto?
Porque hemos podido avanzar en nuestro Plan B y porque la experiencia de la reforma nos dejó muchas enseñanzas.
Las grandes reformas, con mayúscula, se convierten en tinglados ideológicos que nada resuelven y simplemente polarizan.
La ruta adecuada es la del mejoramiento gradual, incremental, paso a paso.
¿Qué les dice a quienes creen que una ley es todavía necesaria?
Que llegó, la hora de superar la inercia de la crisis y trabajar conjuntamente en la recuperación de la confianza y en el diseño de soluciones concretas para algunos de los problemas concretos que persisten.
¿Cuáles son los puntos críticos para que el sector no vuelva a deteriorarse en los meses que vienen?
No dar saltos al vacío. Lo peor que le podría pasar al sector es una propuesta de borrón y cuenta nueva.
En general, ¿cómo calificaría el esquema de salud vigente en Colombia?
A pesar de los problemas, de las falencias, que son muchas, Colombia tiene uno de los mejores sistemas de salud del continente.
Así lo señaló la Organización Mundial de la Salud hace algunos años.
¿Quisiera seguir en el Ministerio o, para usar el término futbolístico, está pidiendo un cambio?
Estoy un poco cansado, como es obvio, pero sigo a órdenes del técnico por si me necesita para culminar la tarea.