El precio de la vivienda nueva en Colombia se incrementó 12,32 por ciento en el primer trimestre del 2014, según la variación anual reportada por el Dane que en el mismo periodo del 2013 había registrado un incremento de 11,76 por ciento.
La capital del país y Bucaramanga comparten los mismos inconvenientes: falta de suelo urbanizable y, por lo tanto, el poco que se ofrece es muy caro.
En ese sentido, Sandra Forero, presidenta de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol) ha dicho en varias ocasiones que “urge la implementación de estrategias de largo plazo que apoyen la actividad en materia de habilitación de tierra, acceso a servicios de agua potable y saneamiento básico, entre otros” y, de paso, vuelve a descartar cualquier riesgo de burbuja.