Sol Meliá indicó que registró unos ingresos de 266,7 millones de euros (unos 361 millones de dólares), que suponen una caída del 9,7 por ciento frente a los 295,2 millones de euros (unos 401 millones de dólares) de 2008.
Añadió que el EBITDA o resultado bruto de explotación descendió un 37,4 por ciento en el mismo periodo al pasar de 62,9 millones de euros (unos 85,5 millones de dólares) a 39,4 millones de euros (unos 53,5 millones de dólares).
La compañía precisó que la cuenta de resultados acusó en este periodo la debilidad de la demanda, algo que contrasta con el primer trimestre de 2008, periodo en el que la intensidad del impacto de la crisis sobre el sector turístico era todavía moderada.
En cuanto a las inversiones previstas para 2009, la compañía informó de que mantiene su objetivo de no sobrepasar los 90 millones de euros (unos 122 millones de dólares), cantidad que se va a destinar principalmente a mantener sus hoteles en condiciones óptimas.
La cadena hotelera agregó que el gasto por expansión o crecimiento de su cartera hotelera será inapreciable, pues se va a adoptar de cara a futuras incorporaciones las fórmulas de gestión, alquiler y franquicia.
Sol Meliá es una empresa hotelera fundada en 1956 en Palma de Mallorca, en la isla mediterránea de Mallorca, y cuenta con más de 300 hoteles distribuidos en 28 países de cuatro continentes.