¿El país sufre de desabastecimiento de arroz o no? El dato de inflación del pasado mes de febrero sorprendió a la economía nacional, pues el 1,15 por ciento de aumento fue más que lo pronosticado, y el acumulado anual se ubicó en 4,36 %, por encima del rango meta del Banco de la República.
Uno de los sectores que generó este repunte en el Índice de Precios al Consumidor fue el de Alimentos que repuntó 1,81 por ciento. Dentro de este, el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) reportó que cereales y productos de panadería subieron 7,82 por ciento. Así mismo, se señaló que dentro de cereales, el arroz subió sus precios 17,2 por ciento en el segundo mes del año.
Ese día, el pasado 5 de marzo, se habló entonces de que el país sufría desabastecimiento de arroz y que eso era lo que estaba generando presiones inflacionarias.
Sin embargo, un informe presentado el pasado viernes 13 de marzo, por el director ejecutivo de la cámara de Induarroz, Jeffrey Fajardo, estimó que el mercado arrocero sufre de un escaso abasto (término técnico) más no de desabastecimiento.
Cabe señalar que el mismo Fajardo había declarado al diario El Tiempo que si había escasez porque “el mercado lo refleja”, el pasado 27 de enero de 2015.
De todas maneras, Fajardo anunció en la presentación de las cifras que dicho “escaso abasto” responde a dos factores.
El primero se debe a la reducción de las áreas disponibles para la cosecha de arroz.
En el departamento del Meta se redujo hasta en un 50 % el área de tierras cultivables, mientras que en los departamentos del Cauca, César y Guajira, cerca de 16.900 hectáreas se perdieron por la sequía del 2014.
El segundo elemento está relacionado con las bajas importaciones de arroz, explicó el funcionario de la Andi.
Después de la crisis diplomática protagonizada por el Gobierno colombiano y el ecuatoriano entre el 2008 y el 2009, las importaciones de arroz ecuatoriano se congelaron y el mercado nacional terminó absorbiendo el arroz de contrabando para suplir la demanda colombiana.
¿POR QUÉ NO ES CIERTO QUE HAY DESABASTECIMIENTO?
Aunque las existencias de arroz se ubican en una cifra relativamente baja, 290.000 toneladas según la Bolsa Mercantil de Colombia (BMC), no hay justificación para hablar de escasez o desabastecimiento.
Es decir, el problema se centra en la comercialización del cereal, pues el precio de este subió en todo febrero un 17,2 %. Así mismo, el arroz se encareció desde enero hasta febrero cerca de un 30,45 %, según datos del Dane.
Según Fajardo, el cierre injustificado a las importaciones de la Comunidad Andina de Naciones (Can) y la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos (EE. UU.) en mayo de 2012 han generado una “profunda distorsión de los precios” y además “se disparó el contrabando”.
SUBASTAS COSTOSAS
El precio de la tonelada por arroz en dólares -a 2015- es muy alta en Colombia frente a otros mercados.
En el mercado colombiano, una tonelada de arroz paddy verde, que es el arroz que venden las fincas productoras a los molinos, tiene un valor de 583 dólares. Frente a otros países, Colombia encabeza la lista de los precios más altos: Ecuador (US$380), Perú (US$320), Uruguay (US$316), Brasil (US$277) y Estados Unidos (US$265).
El director de la cámara de Induarroz también resaltó que el mecanismo de contingentes arancelarios, que permite importar una cantidad determinada de arroz libre de arancel, ha sido una medida perversa.
Estas importaciones de arroz provenientes de EE. UU. funcionan a través de una subasta. En otras palabras, una cantidad específica de arroz es adquirida por un importador que ofrezca el precio más alto.
El sistema de subastas ha encarecido el valor promedio del derecho de importación de una tonelada de arroz proveniente del mercado estadounidense. Este valor ha crecido en promedio entre octubre de 2012 y febrero de 2015, aproximadamente 367 %.
Induarroz calcula que el precio de tonelada subastada se ubica sobre los 416,25 dólares. A este valor se debe sumar el costo que produce el transporte desde un puerto estadounidense hasta el puerto de Barranquilla: 528 dólares.
En resumen, una tonelada de arroz estadounidense puesta en el mercado colombiano se cotiza en 950 dólares incluyendo un arancel del 80 %. Por el contrario, la tonelada colombiana tiene un valor local de 1.459 dólares.
Así las cosas, el consumidor colombiano paga el arroz más caro de la región. En un caso hipotético que Colombia importara arroz de otros países, el país aún tendría la tonelada más cara de arroz: Uruguay (US$1.014), Argentina (US$997), Ecuador (US$952), Perú (US$899), Tailandia (US$850) y Vietnam (US$756).
Otra hecho que sorprende de las declaraciones de Fajardo responde a los ingresos que obtuvieron los productores de arroz estadounidenses y Federación de Arroceros (Fedearroz).
Los cálculos son los siguientes: la subasta de febrero de 2015 otorgó 63.000 toneladas a un precio de 426 dólares cada una. Es decir, la operación registró 26 millones de dólares. Las ganancias se dividen por partes iguales para los agricultores estadounidenses y Fedearroz.
En este orden de ideas, el consumidor colombiano transfirió US$13 millones a las arcas de los productores de los Estados Unidos. Con esa cifra, cerca de 32.500 millones de pesos colombianos, se podrían construir casi 360 viviendas de interés social (VIS).
SIGUE EL CONTRABANDO
Por otra parte, Fajardo señaló que otro de los problemas que afronta el sector arrocero en su conjunto es el contrabando de arroz y su conexión con el encarecimiento de los precios de la tonelada.
La reducción de las importaciones ecuatorianas, las cuales pasaron de 500.000 toneladas a 80.000 toneladas, ha posibilitado el auge del contrabando del arroz. Que según la cámara de Induarroz es controlado por grupos guerrilleros y bandas delincuenciales.
Entonces, volviendo a la pregunta: ¿hay arroz o no?
Si. Si hay arroz. Aunque los inventarios de arroz han disminuido, durante el primer trimestre de 2015 se espera acumular 485.000 toneladas de arroz.
Lo que realmente debería preocuparle al consumidor colombiano es el futuro del precio del arroz y el futuro de la industria arrocera.
Estimaciones de Induarroz, con apoyo de Fedesarrollo, muestran que para el 2030, el arroz estadounidense no pagará aranceles. Si hoy pagando el 80 % de arancel, el arroz importado de los EE. UU. es más barato que el arroz nacional, ¿cómo podrá competir la industria colombiana?
Y con respecto al precio, Induarroz no fue capaz de asegurar la fecha en que el arroz baje de precio. Lo único que podría mejorar la situación es que el Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura, fije un precio.
ASÍ COMEN ARROZ LOS COLOMBIANOS
El consumo promedio de arroz blanco de cada colombiano entre 2000 y 2011 fue de 38,5 kilogramos anuales.
En el período 2012-2014, un colombiano consumió en promedio 26 kilos de arroz. En el 2014, cada colombiano se alimentó con 26,34 kilos de arroz.
Este consumo es bajo cuando se compara a nivel internacional. Según estimaciones de la Organización para la Alimentación y la Agricultura (Fao, por sus siglas en inglés) para el 2013 cada persona consumiría anualmente 56 kilos.
Durante los últimos días, los colombianos han estado preocupados por el supuesto desabastecimiento de arroz en los supermercados y tiendas de barrio. Se suponía que el arroz desaparecería de los platos de los colombianos.