El empleo generado en el subsector de carreteras, en Colombia, tiene una elevada estabilidad. Así lo demuestra el más reciente estudio de caracterización de los puestos de trabajo del sector de la infraestructura realizado por la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI).
Los empleos generados con la ejecución de las obras de infraestructura vial son, en su mayoría, formales. Una muestra de esto es que en las concesionarias menos del 1 % de las plazas son temporales, y aunque en las constructoras el porcentaje es mayor, no supera el 50 %.
“En total, el 81 % de los trabajadores del subsector de carreteras se encuentra vinculado a sus empresas de forma permanente... casi la totalidad de los empleados se encuentran afiliados al sistema de salud, aportan a fondos de pensión y están vinculados a una ARL”, dice el estudio publicado en la revista Infraestructura & Desarrollo de la CCI.
De acuerdo con la CCI, el salario promedio de los trabajadores que están relacionados con la construcción de vías en el país es aproximadamente igual en las concesionarias que en las constructoras.
Por ejemplo, un coordinador de obra u operaciones que trabaja para una concesionaria tiene ingresos mensuales que ascienden a los $ 5,5 millones, mientras que el mismo cargo en una constructora recibe un 15 % menos, es decir, alrededor $ 4,3 millones.
Por su parte, los trabajadores en el nivel inferior de calificación o los que se encargan de las labores de construcción perciben, en promedio, $ 855.000 mensuales, tanto en las concesionarias como en las constructoras. “En todos los niveles ocupacionales, los trabajadores de uno u otro tipo de empresa reciben primas anuales equivalentes a un salario mensual, en la medida en que se encuentran vinculados de manera formal a las empresas”, apunta el estudio.
Además, los resultados de la investigación arrojaron que los trabajadores tienen beneficios adicionales. El 58 % recibe subsidio de alimentación y a el 90 % le suministran dotación para sus labores.