La perspectiva para la inversión de privados en infraestructura es optimista, mientras que el gobierno del presidente Iván Duque dice que hay pocos recursos públicos para el sector.
Según afirmó el mandatario en los últimos días, durante el cuarto taller ‘Construyendo País’, su administración recibió un presupuesto en el cual el sector de infraestructura tiene un desfinanciamiento. “Nos toca a nosotros aumentar los recursos para muchos de esos programas y también, una liberación de vigencias futuras”, indicó.
(Lea: El riesgo con las vigencias futuras).
De hecho, el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, también ha señalado que el espacio fiscal del país a corto, mediano y largo plazo es muy corto, por lo que se podrían aprobar pocas vigencias futuras para nuevos proyectos, contrario a lo que se ha hecho en los últimos años.
Para Argelino Durán, presidente de la Sociedad Colombiana de Ingenieros (SCI), efectivamente el Gobierno tiene un presupuesto muy apretado. “En el caso de las vías terciarias, por ejemplo, indudablemente es una prioridad, pero vemos que hay dificultad de que se consigan más recursos. El Gobierno encontró que existe poco espacio para más vigencias, dado que hay muy poco espacio fiscal”, afirmó.
Para el caso de las autopistas de cuarta generación (4G), Durán reiteró que es clave que el Gobierno se asegure de que estos proyectos se saquen adelante. “Es una inversión muy importante y hay que honrar esos compromisos”, añadió.
En ese sentido, Juan Martín Caicedo, presidente de la Cámara Colombiana de Infraestructura (CCI) resaltó que el nuevo gobierno ha demostrado su interés en trabajar de manera conjunta con el sector.
(Vigencias futuras y deuda pública).
“La ministra de Transporte, Ángela María Orozco, comprende la importancia del programa 4G dentro de las perspectivas de corto plazo del sector, y el Ministro de Hacienda ha manifestado su compromiso con la infraestructura. Todas esas son buenas señales para los mercados, los inversionistas y los bancos”.
Caicedo reiteró que las concesiones de las vías 4G solo reciben recursos públicos –que están reflejados en las vigencias futuras– cuando la infraestructura entre en funcionamiento, por lo que la obra se hace gracias al “músculo de los privados”.
En cuanto a la liberación de las vigencias futuras, fuentes del Ministerio de Hacienda informaron que los detalles de los planes del Presidente, en ese caso, serán dados a conocer en los próximos días.
Y agregaron que la administración de Duque está trabajando actualmente en una recomposición del presupuesto que dejó el gobierno de Juan Manuel Santos, con la que buscarían darles un impulso a varios sectores de la economía.
LA INVERSIÓN PRIVADA
En cuanto al interés del sector privado en invertir en proyectos de infraestructura, el panorama es optimista.
De acuerdo con la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), para este año se espera una destinación superior a los 8 billones de pesos en proyectos carreteros de primera, segunda, tercera y cuarta generación. “Habrá un flujo de inversión privada importante en el sector. Mientras el programa 4G se encuentre en construcción, los flujos de capital y de recursos privados serán muy importantes como dinamizadores del sector”, resaltó Caicedo.
Uno de los desafíos para cumplir la meta de la ANI, según subrayó el presidente de la CCI, es la gestión contractual de las vías 4G. “Esto implica hacerle seguimiento día a día al contrato durante su larga vida, para así no generar retrasos en las obras, dar confianza a los financiadores y evitar ambientes litigiosos. Además, que la nueva administración de la ANI se ponga rápido al tanto del estado actual de los proyectos, para tomar las decisiones que correspondan y dar dinamismo a las obras”, dijo.
Otra de las grandes inversiones que se esperan para este año, según la ANI, es la de los aeropuertos. Estimaciones de la entidad indican que habría $555.000 millones asignados a estas estructuras, que buscan mejorar la conectividad.
“Se ha avanzado mucho en las terminales aéreas y eso ha sido bastante positivo para el país. Esperamos que eso siga siendo así”, puntualizó Durán.
CORREDORES FÉRREOS
Otro de los sectores que recibirá inversiones para este año, aunque no mayores que las carreteras o aeropuertos, son los corredores férreos. De acuerdo con las metas de la ANI, de esa manera se invertirían $196.300 millones. “Aunque estos corredores son claves para el país, todavía se están evaluando algunas iniciativas privadas, pero los recursos asignados a este rubro han sido tímidos”, manifestó Durán.
Por su parte, Caicedo aseguró que aunque las inversiones lucen insuficientes, “se debe tener en cuenta que este modo de transporte no maneja los mismos niveles de carga (demanda) que los demás. Las características geográficas del país no facilitan la construcción de trazado que contribuyan a generar mejoras en la competitividad”.
María Camila González Olarte