La firma del acta de inicio de las obras de la primera Línea del metro de Bogotá, que se celebró ayer, marca un punto de inflexión para el proyecto y la construcción del medio de transporte para la ciudad.
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Por un lado, culmina un proceso de casi ocho décadas, pues desde 1942, cuando el entonces alcalde Carlos Sanz de Santamaría propuso la construcción de un metro, no se había podido concretar su ejecución; por otro, es el inicio de la construcción de la primera línea del sistema, que movilizará más de un millón de pasajeros al día e iniciará su operación comercial en 2028.
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“Llegamos después de casi cinco años de trabajo a este punto, superamos retos inéditos, este se trata de uno de los proyectos más grandes de la ingeniería de Colombia, con la particularidad de que se desarrollará en una gran ciudad”, dijo el gerente de la empresa Metro, Andrés Escobar.
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En noviembre pasado la compañía firmó el contrato con el consorcio Metro Línea 1, conformado por las empresas China Harbour Engineering Company Limited y Xi’An Metro Company Limited, las cuales han participado en la construcción, en China, de los metros de Wuhan, Tianjin, Qingdao, Shanzen, Xi’an y Hong Kong; el de Singapur, Kuala Lumpur (Malasia), Canberra y Sídney (Australia).
Posteriormente, en agosto, se firmó también el contrato para la interventoría con el consorcio Supervisor PLMB, integrado por empresas provenientes de España, México, Italia y Colombia.
El contrato de concesión estará dividido en tres fases. En la primera se llevará a cabo el desarrollo de los diseños de detalle, que estarán a cargo del concesionario. También se construirá un patio taller, ubicado en la localidad de Bosa, un espacio de 32 hectáreas que tendrá la capacidad para albergar hasta 60 trenes.
En esa primera fase, que se desarrollará en un periodo de 27 meses, se adelantará la construcción de un espacio de prefabricación para las vigas que se utilizarán en el montaje del viaducto que hace parte del proyecto, y la construcción del intercambio vial de la avenida Caracas con calle 72. Además, se completará el desvío de las redes de servicios públicos y se presentará el plan de manejo de tráfico.
Durante los siguientes cinco años se llevará a cabo la segunda fase de la concesión, en la que se edificarán las 16 estaciones que componen los 23,9 kilómetros de la primera línea del metro, y el viaducto. También, se construirán obras para Transmilenio, nuevos puentes en la Avenida 68, un deprimido peatonal en la calle 13, y los sistemas electromecánicos y de comunicaciones que requiere el metro para su funcionamiento.
La última etapa del contrato es en la que se realizarán las pruebas de diseño y los ensayos de funcionamiento. Para 2025, de acuerdo con el consorcio Metro Línea 1, llegarán los primeros trenes al país, pero se estima que los primeros trenes de prueba comiencen a rodar en el año 2027 y que para el segundo semestre de 2028 la primera Línea del Metro de Bogotá comience su operación comercial plena. La flota inicial estará conformada por 30 máquinas.
“Este gran logro de la ciudad se frenó muchas veces, hoy el metro sale adelante, tenemos el deber de sacar adelante proyectos de envergadura”, dijo la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien destacó que esto no hubiese sido posible sin el trabajo y las bases de las alcaldías pasadas.