Al país todavía le queda mucho por resolver en cuanto a seguridad vial, puesto que el índice de mortalidad en las vías sigue en aumento.
Eso evidenció un informe que hizo Fred Wegman, experto internacional en Seguridad Vial de la Universidad de Tecnología de Delf (Holanda) y presidente del International Traffic Safety Data and Analysis Group (Irtad).
(‘Los accidentes viales bajan la productividad de las ciudades’).
El documento, que fue presentado recientemente a la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), también busca hacer algunas recomendaciones con el fin de disminuir los siniestros viales en Colombia.
Uno de los puntos que resalta el informe de la Irtad es que Colombia es uno de los países que no está mejorando en la reducción de las tasas de mortalidad relacionadas con siniestros viales, como si lo están haciendo Uruguay y Chile.
Para Wegman, a Colombia le queda mucho trabajo por adelantar para resolver los problemas de movilidad y de seguridad en las vías. “Cuando miramos el índice de mortalidad de Colombia no vemos que no lo está haciendo mal, pero tampoco lo está haciendo bien; teniendo en cuenta que el índice de mortalidad vial ha ido creciendo en los últimos años, eso es una razón de preocupación y es necesario ver cómo se trabaja en ese sentido”, manifestó el profesor.
(Accidentes de tránsito cuestan $3,6 billones a la seguridad social).
De hecho, según el Observatorio Nacional de Seguridad Vial de la ANSV, a septiembre han fallecido 4.780 personas por cuenta de accidentes viales, en la que la mayoría de las víctimas (81,07%) son hombres entre los 20 y 25 años.
LAS MOTOCICLETAS
Otro de los puntos que resalta el estudio es que la mitad de los siniestros viales que se registraron en los 10 países analizados, incluido Colombia, tuvieron que ver con motociclistas.
“Reducir los índices de accidentalidad es una de las áreas más problemáticas, y la pregunta que se tienen que hacer las autoridades es si aceptan un crecimiento tan acelerado del uso de las motocicletas. La otra pregunta que se deben hacer es por qué las personas compran más motos”, detalló Wegman.
Según el planteamiento del experto, las ciudades también tienen que empezar a revisar sus otros modos de transporte y por qué su desempeño está llevando a que las personas busquen otras alternativas, como la de comprar moto.
LAS RECOMENDACIONES
El informe, además de hacer un diagnóstico y revisar la situación de 10 países del continente, tiene como tarea la de dar algunas recomendaciones que se puedan aplicar al caso colombiano, con el fin de que se mejoren las estrategias para atacar esta problemática, que ya se convirtió en una de las principales razones de la mortalidad en el país.
“En el estudio tenemos una larga lista de las áreas potenciales en las que Colombia puede trabajar. Es una invitación para que las autoridades y la ANSV analicen las sugerencias. Espero que Colombia tenga una nueva estrategia a partir de ello”, manifestó el presidente de la IRTAD.
En ese sentido, en el documento proponen que se haga una mejor gestión vial, se controle mucho más los límites de seguridad, se invierta en sistemas de datos de seguridad vial, se fortalezca el control policial, se prioricen las necesidades de los peatones, se prioricen las acciones para aumentar la vigilancia de los motociclistas, entre otros.
“Se tiene que trabajar para tener unas fuertes raíces de seguridad vial. No es realmente un trabajo que se tenga que hacer en unas pocas áreas, es algo más complicado que eso. Además, no tiene que ser un trabajo de unos pocos años, sino que tiene que ser continuo”, concluyó Wegman.
ALCOHOL, EL OTRO ENEMIGO
De acuerdo con el informe, otra de las principales problemáticas que se reconocieron en Latinoamérica tiene que ver con el número de personas que conducen bajo los efectos del alcohol. En el caso de Colombia, se estima que el 8% de las muertes tiene que ver con personas que habían bebido alcohol.
Ante eso, las entidades proponen intensificar “los controles de alcoholemia, a través de pruebas en alcoholemias aleatorias, para conductores en todo tipo de vehículos (inclusive motocicletas), combinado con campañas en medios masivos”.
Sumado a eso, plantean la posibilidad de que se le realicen pruebas de alcoholemia a todas las personas que participaron en una colisión que dejó lesionados.