El mecanismo de obras por impuestos, creado en la reforma tributaria del 2016, cumplió hace poco dos años de implementación y ahora se acerca al medio billón de pesos en inversión a lo largo y ancho del país.
Su acogida fue tal que si bien todas las vigencias deben cerrarse el 31 de diciembre de cada año, las dos primeras (2017 y 2018) tuvieron que prorrogarse en su momento, e incluso la del 2018 terminó el pasado jueves, 28 de febrero.
(Gobierno alista nuevas reglas para las obras por impuestos).
Emilio José Archila, consejero Presidencial para la Estabilización y la Consolidación, aseguró: “Es evidente que estamos generando una gran confianza y que, basados en esa confianza, el sector privado está acompañándonos en el mecanismo de obras por impuestos”.
Y es que a pesar de que el techo fiscal del mecanismo es de $250.000 millones, para la vigencia 2018 –que se cerró la semana pasada– el país logró aprobaciones de proyectos por más de $325.000 millones, es decir, más de $70.000 millones por encima de lo previsto inicialmente, e incluso mucho más de lo que logró en su momento el gobierno peruano en su primer año.
Según la entidad, estos proyectos visibilizarán la hoja de ruta que el gobierno de Iván Duque ha definido para estas zonas y resaltó que, del total de proyectos, 22 iniciativas, por más de $130.000 millones están ubicados en áreas de incidencia de los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET).
CIFRAS, AL ALZA
Los trabajos que realizarán los empresarios en dichas zonas incluyen, entre otros, colegios, puentes, mejoramientos viales, agua potable, energía eléctrica y saneamiento básico, y aplicarán específicamente para las zonas más afectadas por el conflicto (Zomac), definidas hace un tiempo por el Ministerio de Hacienda.
Ahora, con un proyecto ya terminado y entregado, varios más en ejecución y otras decenas de obras a punto de iniciar, el Ejecutivo aspira que las cifras sigan avanzando y las inversiones se disparen en lo que queda del gobierno Duque.
(Aprueban 23 proyectos en 'Obras por impuestos').
De hecho, Archila confirmó que con lo hecho en el segundo semestre del año pasado y lo que se hará de aquí a junio, el Gobierno prevé que las inversiones de todo el programa lleguen a $470.000 millones (y superen pronto el medio billón de pesos), los cuales irán a mejorar la infraestructura de las Zomac, en compensación con el pago del 50% del impuesto de renta de las empresas inscritas y avaladas, que –por ahora– se acercan a 50.
Sin embargo, el funcionario afirmó que estar continuarán subiendo en número, por cuenta de diferentes ajustes que se le hizo al mecanismo vía la ley de financiamiento, entre los cuales se encuentran la apertura para que las personas naturales también participen de los procesos.
Además, se les dio parte de tranquilidad a los privados sobre la vigilancia de los recursos a ejecutar, se ampliaron los sectores que podían incluir las obras por impuestos y se abrió la posibilidad para realizar modificaciones presupuestales a los proyectos, siempre y cuando cumplan con unas reglas de juego y controles de varias entidades.
En cualquier caso, según el alto consejero para la Estabilización y la Consolidación, “las empresas interesadas en participar del programa obras por impuestos deben tener la liquidez y demostrarla en su momento para ejecutar la obra respectiva; eso nos parece relevante, ya que deben acreditar que tiene todas las capacidades”, de tal modo que puedan responder en todas las fase del proyecto.
POR AQUÍ Y POR ALLÁ
Sin embargo, estos no son los únicos cambios. Las bases del Plan Nacional de Desarrollo (PND) incluyen, además, ajustes de forma y fondo para este mecanismo.
Para esto, Planeación prevé buscar una fórmula para “viabilizar los proyectos de construcción y/o reparación de infraestructura financiables por el mecanismo de pago de obras por impuestos a escala nacional, en procura de estandarizar costos y procedimientos para el desarrollo de las obras”, e incluso pretende incluir en los sectores beneficiados al tratamiento de residuos sólidos en los municipios Zomac.
(Listo primer paquete de 27 proyectos para hacer en obras por impuestos).
Las metas, en general, son ambiciosas y buscan que los proyectos ejecutados vía obras por impuestos pasen de una línea base de 23 (meta anterior) a 80 durante los cuatro años de Gobierno Nacional. De lograrse lo anterior, en Colombia podría abrirse la puerta para que las inversiones logradas se cuadrupliquen a corto plazo.
‘LOS LOGROS SON MODESTOS’: FUNDACIÓN IDEAS PARA LA PAZ
Un estudio de la Fundación Ideas Para la Paz (FIP) encontró que el resultado del primer año del programa obras por impuestos en Colombia fue mucho mejor de lo que se esperaba.
Para concluir esto, determinaron que durante la primera vigencia de Perú (uno de los países de donde se copió el modelo), “solo se financiaron dos proyectos por un valor aproximado de US$1,8 millones, mientras que en Colombia se aprobaron 23 proyectos por un valor aproximado de US$70 millones”.
A pesar de lo anterior, el grupo de expertos indicó que es necesario realizarle reformas al mecanismo, “bien sea por fallas en su concepción como por las limitaciones presupuestales y sectoriales, entre otros, a la hora de implementar los proyectos”.
Entre los lunares del programa, la FIP indicó que uno de estos tiene que ver con que si bien hubo inversiones importantes en el primer año de ejecución, solo se impactó el 8,1% de las zonas más afectadas por el conflicto (Zomac), a pesar de se logró usar casi el 90% del techo fiscal.
“Esa cifra resulta paradójica teniendo en cuenta que, si bien el mecanismo inició con un buen ritmo de implementación, a nivel de impacto estratégico en el territorio los logros son modestos”, indicó el centro de estudios.
Para combatir este problema, la fundación, empresas y gremios del país concluyeron que es vital reformar las zonas Zomac y PDET para permitir la inclusión de municipios que hoy no están contemplados y “focalizar aún más la implementación del mecanismo, llevándola exclusivamente a los 170 municipios PDET, con el objetivo de generar un mayor impacto en la transformación territorial”.
Además, se debería “direccionar el mecanismo a la implementación de proyectos solo en las zonas rurales de los municipios focalizados” e incluso piden ampliar el cupo anual, “de tal forma que crezca el alcance de las obras en cuanto a geografía y tamaño”.
Por último, aseguran que se debería implementar un sistema de rotación de municipios por anualidad dentro de los Zomac, “para extender el impacto del mecanismo”.