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Innovación

28 sept 2018 - 8:30 p. m.

California lidera la energía limpia en hogares ‘inteligentes’

El estado quiere que las viviendas tengan energía solar, pero cuestionan los costos

Energías renovables

Aunque los sistemas de energías limpias presentan un alto costo de instalación, la reducción en los costos de uso puede ser superior al 10%.

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California se convirtió en el primer estado de Estados Unidos en exigir que haya energía solar en todas las casas nuevas para 2020, consolidándose como pionero en energía limpia.

Los nuevos estándares de construcción también incluyen requisitos de ventilación de aire e iluminación para reducir el uso, y además proporcionarán energía solar a los hogares de miles de personas. Los funcionarios prometen que el costo más alto será compensado por la reducción de costos en las facturas.

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“Los edificios nuevos que comprarán los californianos operarán de manera muy eficiente mientras generan su propia energía limpia”, dijo Andrew McAllister, miembro de la Comisión de Energía de California. “Costarán menos para operar y proporcionarán una plataforma para tecnologías ‘inteligentes’ que impulsarán al estado hacia un futuro de bajas emisiones”.

Para los defensores de la energía limpia la decisión refleja la transformación que ha comenzado a surgir en la industria y el papel de los ciudadanos en la configuración de su uso.


Las políticas gubernamentales para reducir las emisiones de carbono, junto con la disminución de los costos de la energía renovable y los avances en la tecnología, están ayudando a socavar las formas tradicionales en que se produce, almacena y consume la energía.

(Lea: Aval a energías limpias en el sistema nacional

El modelo actual en el que la empresa que envía energía desde una central eléctrica de gas o carbón a través de una red central de transmisión a los clientes está sucumbiendo. En el nuevo orden, los consumidores tomarán un papel más activo en la gestión del consumo y su origen.

Usarán dispositivos ‘inteligentes’ que controlarán la calefacción y la iluminación de forma remota y les aconsejarán si su caldera es ineficiente. Generarán energía a través de paneles solares en sus techos, por ejemplo, y almacenarán cualquier exceso de energía o la venderán nuevamente a la red.

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Pero los expertos advierten que el cambio aún está en su infancia. “Todavía estamos en las primeras etapas. La mayoría de los consumidores siguen usando energía de manera pasiva”, señala Richard Howard, jefe de investigación de la consultora Aurora Energy Research.

La tecnología digital acelerará el cambio. Los ejecutivos de las compañías eléctricas más grandes del mundo, incluyendo Engie de Francia y Centrica en el Reino Unido, están invirtiendo en soluciones para retener su base de clientes y ayudar a proteger sus ganancias.

Iain Conn, jefe Ejecutivo de Centrica, describe la transición como una en la que el poder y la influencia se mueven “hacia el cliente”. La compañía ha desarrollado servicios como Hive, un termostato inteligente que permite a los usuarios controlar su calefacción y agua caliente a través de sus teléfonos.

La promesa de gastar menos en energía y la satisfacción de mitigar las emisiones de carbono siguen siendo atractivas para los consumidores. En Alemania, por ejemplo, donde los consumidores residenciales enfrentan altos cargos de electricidad, el cambio a paneles solares en los techos ha sido alta. “Las tarifas de suministro nacional son ahora tan altas que la economía de la autogeneración es vista positivamente”, apunta Howard de Aurora, quien predice que la capacidad de energía solar instalada en las casas y los sitios comerciales se triplicará en Alemania a 80GW en 2030, frente a los 25GW en 2016.

Se espera que hasta la mitad de esta capacidad pronosticada esté acompañada de baterías que almacenarán energía cuando el sol no brille. A más largo plazo, los consumidores dejarán de depender de las redes de distribución para satisfacer sus necesidades de energía, según expertos.

En Brooklyn, Nueva York, los residentes de un complejo de viviendas sociales se están beneficiando de su propia microrred, instalada por la mayor empresa de servicios públicos de Italia, Enel, a través de Demand Energy, una compañía que compró en 2017.

Los paneles solares producen energía limpia para las unidades de aire acondicionado y, en cualquier momento que los paneles capturen más energía de la que necesita, un gran sistema de baterías de iones de litio almacena la electricidad para ser utilizada a futuro. Se estima que el sistema costó unos US$4 millones, pero ayudó a reducir la factura anual de la propiedad un 10%.

“La reducción del costo ya no es un factor lo suficientemente fuerte para los consumidores”, indica Francesco Venturini, director global de Enel X, la unidad de servicios establecida del grupo. En cambio, la compañía busca “modelos de reparto de ingresos” que permitan a los consumidores participar activamente en los mercados de energía.

Una forma sería proporcionar soluciones de almacenamiento de batería que ayuden a los clientes a cambiar o reducir su consumo de electricidad en los períodos pico en respuesta a los incentivos financieros.

En California, no todos los agentes inmobiliarios están convencidos por los beneficios del mandato del estado sobre paneles solares.

Muchas compañías les imponen arrendamientos onerosos a los propietarios que pueden generar altos costos, mientras que la tecnología en sí misma también necesita ser reemplazada, explica Elizabeth Weintraub, agente de bienes raíces. “Los millennials están más abiertos a hogares inteligentes y eficientes en el consumo de energía”, agrega. “Pero no entienden cómo funciona. Para muchos será una actualización que no querrán pagar cuando vean los costos”.

Sylvia Pfeifer

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