Cualquier ser humano tiene la capacidad de enseñar: desde niños solemos explicar a nuestros pares sobre un juego o un tema determinado, como adultos o padres, se habla sobre la vida y los valores personales y sociales, mientras que los maestros dan lecciones de alguna materia en puntual como matemáticas, ciencias o química. Sin embargo, pocos son los que entienden y educan acerca de las emociones, la ansiedad, el estrés o la depresión.
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A medida que pasa el tiempo, estos temas cada vez ganan más relevancia, teniendo en cuenta que de acuerdo con Unicef, la ansiedad y la depresión representan casi el 40% de los trastornos de la salud mental diagnosticados en niños y jóvenes de todo el mundo.
Mientras que un estudio reciente que realizó la Asociación Colombiana de Universidades (ASCUN), descubrió que en Colombia al menos el 55 % de los estudiantes universitarios presentaron mayor irritabilidad durante la pandemia, 48 % se sentían más solos, 38 % no le hallaba sentido a la vida y el 34 % tuvo una baja de autoestima.
Estos hechos y la falta de una verdadera educación socioemocional en Latinoamérica, fue lo que llevó a Coschool, una empresa que impulsa programas para fomentar el Aprendizaje Social y Emocional en la región, a desarrollar una plataforma educativa (edumocion.co) que busca enseñar sobre estos temas y mejorar los índices de salud mental.
Henry May, quien es el fundador y CEO de esta organización, explica que este espacio digital, es para cualquier persona que se considere educador y tiene como objetivo este año, tener más de 50 mil usuarios, que puedan conectarse a más de 100 contenidos diversos sobre temas como bienestar, salud mental, gestión del tiempo, desarrollo socioemocional, productividad, entre otras cosas.
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“Lo más interesante es que estamos construyendo una comunidad de aprendizaje en torno al desarrollo socioemocional, en el que los educadores y mentores, no solo tengan clases pre grabadas, sino que también se puedan relacionar en eventos, webinars, espacios de consulta y mentoría, para debatir sobre estos temas. Además, podrán encontrar un ‘educamino’, es decir, una ruta personalizada de aprendizaje en la que se profundiza en ciertas temáticas a trabajar”, resaltó May.
Se debe señalar que si estos educadores logran establecer relaciones positivas con niños o jóvenes, les enseñan desde el comienzo a conectarse con su alrededor, esto les ayudará a tener un crecimiento en su inteligencia emocional, algo, que no solo es significativo en el ámbito académico, sino que agrega valor también en el laboral.
La base de la educación socioemocional, es un proceso en el que los menores construyen su identidad, su autoestima, la confianza en sí mismos y en el mundo que los rodea, pero también es un proceso que requiere de adultos que adquieran y apliquen efectivamente los conocimientos, actitudes y habilidades necesarias para: entender y manejar las emociones, establecer y lograr objetivos positivos, sentir y mostrar empatía y tomar decisiones responsables, entre otros factores que son claves para tener una buena convivencia en el ámbito social.
El directivo de Coschool resalta que la educación socioemocional es una necesidad en la realidad actual que enfrentan los países de Latinoamérica y es la única salida para evitar una pandemia de salud mental. Y agrega que desde su organización, están terminando un estudio que sacaran a la luz a mediados de julio o principios de agosto, en donde ya lograron identificar que 67% de los educadores que hicieron parte de la investigación, aseguraban que sus mayores reto en este momentos es trabajar temas sobre salud mental y bienestar. En ese sentido, la plataforma edumoción se convierte en una herramienta más que necesaria en la actualidad para cualquier generación de educadores, ya que les permitirá seguir una ruta en donde puedan entender sobre cómo manejar estos temas emocionales en las casas o las aulas de clase.
Por otro lado, recientemente Henry May, quien también es un educador, dio una charla TedX donde habló sobre los mayores retos de la educación en LATAM y desatacó las tres dimensiones de un educador transformador: “aprender de sí mismo, a cómo trabajar con los demás y, a vivir en armonía con el mundo”.
Lo cierto, frente a este panorama es que tanto para gobiernos, centros educativos, como diferentes organizaciones, la educación socioemocional debe ser una prioridad para aportar mayor valor a la sociedad y superar retos tan diversos en el sector como lo son, la integración, la deserción y el bienestar.