El primer ministro chino, Wen Jiabao, expresó esta disposición al abrir con el presidente de la Unión Europea, Herman Van Rompuy, y el de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, la 14ª cumbre bilateral, dominada por las inquietudes que suscita la crisis de la deuda de Europa, principal importador mundial de productos chinos.
"Le corresponde a China tomar sus propias decisiones sobre su contribución a la estabilidad de la Eurozona", respondió Van Rompuy a Wen Jiabao, que no precisó cómo podría ayudar a la UE. China indicó en varias ocasiones que le gustaría participar en el fondo europeo de rescate (Feef) y luego en el Mecanismo Europeo de Estabilidad (Mede), el fondo permanente de ayuda a los países de la Eurozona en apuros, que empezará a funcionar en julio.
Sin embargo, los dirigentes de la segunda economía mundial, dotada de las mayores reservas de divisas (unos 3,2 billones de dólares) no han tomado ningún compromiso sobre el monto con el que contribuirían.
"Nuestro mensaje del lado europeo es que Europa está haciendo lo que debe, y seguirá haciéndolo para restaurar la confianza", declaró por su lado Barroso.
Las dos economías son "tan interdependientes que un cambio en la tasa de crecimiento de uno de los dos socios estratégicos tiene un impacto directo y palpable en el otro", dijo Van Rompuy antes del encuentro.
En paralelo al apoyo chino, las negociaciones sobre el estatuto de economía de mercado, que China reclama desde hace tiempo, entrarán en una nueva fase.
Van Rompuy explicó que el comunicado conjunto de la cumbre mencionaba la cuestión por primera vez.
En el Foro Económico de Dalian, el pasado septiembre, Wen pidió que la UE le reconozca ese estatuto a China antes de 2016, la fecha prevista en el calendario de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Ese estatuto de economía de mercado ofrecería a China un mejor acceso al mercado europeo, protegiendo sus productos de las cláusulas contra la competencia desleal. La cuestión deberá ahora solventarse "de forma rápida y exhaustiva", dijo Van Rompuy, asegurando que existe la "voluntad política de buscar soluciones".
El presidente de la UE reiteró el pedido de la Unión de tener un mejor acceso al mercado chino. Es "necesario jugar con las mismas armas, un mejor acceso al mercado (chino) para las empresas de la UE, y una mayor protección de los derechos de la propiedad industrial", declaró.
Concretamente, se abrirán negociaciones con vistas a un acuerdo marco que "facilite y promueva la inversión" de empresas chinas en Europa y viceversa, según el comunicado conjunto publicado tras la cumbre.
El comunicado prevé también una asociación chino-europea sobre la urbanización sostenible, ahora que China tiene más habitantes en sus ciudades que en el campo.
"Nuestra relación es sólida. Hemos andado mucho camino desde el establecimiento de nuestra relación estratégica global en 2003 (...) pero sigue habiendo un potencial muy grande", dijo Van Rompuy al abrir las conversaciones.
Por último, Wen Jiabao declaró que China está "dispuesta a mantener un diálogo sobre todas las cuestiones, incluida la de los derechos humanos" con la UE.
Pekín y Bruselas mantienen un diálogo regular y discreto sobre esta cuestión, en las que se suelen abordar casos particulares.
AFP
