En medio de la revolución del gas natural proveniente de yacimientos no convencionales de hidrocarburos, distintos sectores de la producción y la academia discuten en Estados Unidos las mejores alternativas de aprovechar esta fuente abundante de energía, sin profundizar los daños sobre el medio ambiente.
Desde la industria y algunas instituciones no gubernamentales, se presiona para que se liberen las exportaciones de gas natural y, de esa manera, sobrepasar el dominio que de ese recurso tiene en la actualidad Rusia sobre el mercado mundial.
De otro lado, se plantea aprovechar este recurso natural más barato para estimular la recuperación del sector productivo y beneficiar a amplios sectores consumidores de energía con electricidad a menor precio.
De acuerdo con cifras oficiales, el Millón de BTU (unidad térmica británica) generado con gas natural, ha bajado su costo de cerca de nueve dólares en el 2008 a alrededor de cuatro dólares al terminar el 2013.
En otras palabras, el barril sale costando el equivalente de 29 dólares, prácticamente un tercio del actual valor del petróleo.
Ante las nuevas circunstancias del mercado energético en este país, empresas como la gigante del correo mundial, UPS, que cuenta con una flota de 100 mil automotores, ha indicado que ya inició su transformación sustituyendo vehículos a diésel por camiones movidos por gas natural comprimido y licuado (CNG y LNG).
El anuncio de la dotación de dos mil nuevos vehículos movidos con dichos combustibles fue hecho por el vicepresidente de la compañía, Jim Price, en un reciente foro en el Senado.
Revelo que el propósito de la empresa es alcanzar mil millones de millas recorridas, con combustibles limpios, antes del 2017.
RIESGO AMBIENTAL
No obstante, el éxito económico que se evidencia con el uso del gas natural, en el transporte y en la generación de electricidad en plantas térmicas, persiste también la inquietud sobre el riesgo ambiental que conlleva la explotación masiva de gas de esquisto, por la contaminación tanto del agua como del aire, aunque se reconoce que es mucho menor que la generada por otros productos del sector extractivo: el petróleo y el carbón.
Al respecto, el director del Fondo para la defensa Ambiental, Elgie Holstein, afirmó que a pesar de su bondad, el gas natural, por su alto contenido de metano, es 84 veces más contaminante que el CO2 emitido por el consumo de petróleo y que es causante de buena parte del calentamiento de la atmósfera.
Explicó que de ahí las medidas que están adoptando estados como Colorado, California, Wyoming y Nueva York, donde aún se mantiene la prohibición para explorar y explotar yacimientos de esquisto.
EN COLOMBIA, EL SERVICIO PÚBLICO USA GAS
La disponibilidad del gas en el país, ha favorecido el uso de este combustible en los vehículos, especialmente de servicios público (taxis y busetas), y lo que se conoce como el parque automotor utilitario. Sin embargo, en los camiones de carga no es usado debido a que, según los transportadores, los vehículos no alcanzan la misma potencia de los camiones que operan con diesel. Esto se registra principalmente por las condiciones topográficas difíciles que registra el país.
Germán Duque
Especial para Portafolio
Miami