Warren Buffett admitió el sábado que debió haber indagado sobre las inversiones personales de su ex mano derecha David Sokol, que apostó su dinero en acciones de Lubrizol Corporation mientras le sugería al magnate comprar esa firma.
Sokol era considerado como el principal candidato para suceder a Buffett, de 80 años, como presidente ejecutivo de Berkshire Hathaway Inc., pero renunció el mes pasado luego que se reveló que había comprado 10 millones de dólares en acciones de Lubrizol.
Sokol obtuvo 3 millones de dólares de beneficios cuando Berkshire decidió finalmente comprar Lubrizol. La Comisión de Valores en Estados Unidos está investigando a Sokol, según una fuente cercana al procedimiento.
Buffett dijo que debió haber investigado más cuando Sokol reveló por primera vez que tenía acciones de Lubrizol en enero pasado, dos meses antes de que Berkshire accediera a comprar la compañía química por casi 9.000 millones de dólares.
“Obviamente cometí un tremendo error en no decir 'bueno, ¿cuándo compraste?”, dijo Buffet en la reunión anual de accionistas de Berkshire en Omaha.
Además, calificó la situación de Sokol como “inexplicable e inexcusable”. Este era el tipo de respuesta que los inversionistas esperaban oír de Buffett en la reunión anual de Berkshire, usualmente un encuentro feliz para los miles de accionistas de la firma que Buffett llama el “Woodstock para capitalistas”.
Tras hablar sobre Sokol, Buffett abordó temas como las posibilidades de realizar grandes adquisiciones, una de sus más importantes responsabilidades y la razón por la que los accionistas están tan al pendiente de quién será su sucesor.
Buffett dijo que se mantenía a la caza de compras y aseguró que Berkshire está buscando dos de tamaño similar a la compra de Lubrizol. “Vale la pena hacerlas, pero no podemos ir con una compra mayor ahora”, dijo.
REUTERS