Las tan esperadas medidas que anunció el presidente venezolano Nicolás Maduro la semana pasada para reactivar el aparato productivo y la economía del país, aunque se consideraron un primer paso en la dirección correcta, estuvieron por debajo de las expectativas que había creado en relación con lo que iba a decir, según el sector privado del país.
Eduardo Garmendia, presidente de Conindustria, el gremio que agrupa a este sector venezolano, afirma que hasta el momento solo hay anuncios y que hay que esperar cómo los va implementar el Gobierno, porque como dice el refrán: “del dicho al hecho hay mucho trecho”.
“Maduro dijo que se va a pagar el 30 por ciento de lo que se les adeuda a los industriales, pero falta definir el mecanismo, a cuáles renglones, a qué tasa de cambio, qué va a pasar con el 70 por ciento restante, cuál es el monto al que se va a acceder desde los fondos, con qué intereses, cuáles sectores, si va a ser temporal o recurrente. Como se ve, todo está por ejecutar”, agregó el dirigente gremial a Portafolio.
A este respecto, el presidente de Fedecámaras, Jorge Roig, afirma que tienen muchas dudas: “para recuperar la confianza, es importante dar señales de reconocimiento total de la deuda, no solo el 30 por ciento”.
Además, las deudas tienen que ser canceladas a las tasas que fueron contratadas por el Gobierno, explica Garmendia.
Roig afirma que también se deben establecer los sectores prioritarios, ya que hay unos que tienen más urgencias que otros, “como los de alimentos y medicinas”.
Garmendia añade que, sin embargo, el anuncio en sí mismo es importante y va en la dirección correcta, pero lo más importante son las condiciones y que estas se mantengan en el tiempo, o si no en unos meses se llegará a las condiciones de desabastecimiento actuales.
“También nos gustó que el mismo presidente criticará la burocracia, y que muchas de las cosas que él ha tratado de implementar para mejorar la situación económica no se han podido hacer por este motivo”, aclara.
Por su parte, el diputado opositor por el Estado Mérida, Williams Dávila, opina que las medidas del Gobierno de Maduro son solo coyunturales, con miras a disminuir el desabastecimiento y la inflación de manera temporal, pero no son estructurales, que es lo que se necesita.
“El Gobierno quiere incentivar el sector privado, al cual se encargó de quebrar cometiendo un ‘genocidio económico’”, enfatiza.
Garmendia explica que el sector privado le ha propuesto al Ejecutivo medidas para sacar a la industria de la postración en que se encuentra, tales como seguridad jurídica, lo cual está establecido en la Constitución, con el fin de aumentar la inversión; la revisión a la medida de ‘ley de precios justos’; que se pague la totalidad de las deudas a los proveedores; una revisión a la ley del trabajo, y que el Estado aumente la productividad de sus propias empresas, para proveer materias primas a la industria nacional.
El proceso no es corto, ya que será discutido en las mesas entre empresarios y Gobierno.
Para Dávila, la solución es que el mandatario venezolano reconozca que el modelo fracasó y no seguir poniendo paliativos.
PASOS EN LA DIRECCIÓN CORRECTA
Entre las medidas anunciadas por el presidente Nicolás Maduro está el pronto pago de parte de la multimillonaria deuda estatal con importadores, y la agilización de los trámites burocráticos para compras externas. “Pongo al servicio de este foro económico el fondo chino Fonden, el fondo Mercosur-ALBA, que contienen importantes recursos en divisas y en bolívares para dinamizar una nueva estrategia de inversión", dijo Maduro.
Pedro Vargas Núñez
Subeditor Portafolio