La mayoría de los analistas habían calculado un incremento del 0,3% en el gasto y un avance del 0,1% en los ingresos personales.
Dado que tanto los ingresos como los gastos aumentaron al mismo ritmo, la tasa de ahorro se mantuvo en el 4,4 % ciento, añade el informe.
La inflación medida por el índice de precios en gastos de consumo fue del 0,1% en julio, otro indicio de que las presiones de los precios siguen siendo muy moderadas.
El aumento, aún leve, del gasto de los consumidores en julio fue el tercero consecutivo, lo que indica que, cuatro años después de concluida la Gran Recesión, las compras en los hogares mantienen la expansión económica.
Asimismo, el incremento en los valores de las propiedades contribuyen a fortalecer la adquisición de aparatos domésticos y vehículos a motor, aún cuando las tasas de interés hipotecario han empezado a subir.
EFE
