Los precios del crudo cayeron este lunes, en línea con el declive en los mercados globales de acciones, y borraron su avance de la semana pasada, cuando la Opep y otros exportadores petroleros acordaron una reducción del bombeo a partir de enero.
El precio del barril de petróleo Brent para entrega en febrero terminó en el mercado de futuros de Londres en 60,03 dólares, un 2,80% menos que al finalizar la sesión anterior. El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, concluyó la jornada en el International Exchange Futures con un descenso de 1,73 dólares respecto a la última negociación, cuando cerró en 61,76 dólares.
Las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, que provocan temor a una ralentización de la demanda de crudo, lastraron hoy el precio del Brent, según los analistas. El valor del barril de petróleo volvió a bajar a pesar de las medidas para recortar su bombeo que tomaron la semana pasada la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) y otros grandes productores.
El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI), por su parte, bajó un 3,1 % y se situó en 51 dólares el barril debido a las dudas de los inversores sobre el crecimiento de la demanda, con lo que borró las ganancias del viernes, tras conocerse el pacto de los países de la Opep para reducir la producción. Al final de las operaciones a viva voz en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos futuros del WTI para entrega en enero restaron 1,61 dólares respecto a la sesión anterior.
Los precios del crudo subieron un 3 por ciento el viernes luego de que la Opep y exportadores aliados encabezados por Rusia declararon que reducirían su suministro de petróleo en 1,2 millones de barriles por día.
"Podían no estar de acuerdo en los precios y en el volumen de los recortes pero (...) nadie quería que las existencias subieran", dijo Bjarne Schieldrop, estratega de SEB. "Primero veremos algo de estabilidad (en los precios), aun si el crudo es presionado a la baja por la debilidad de las bolsas".
Las acciones globales han declinado casi un 8 por ciento en lo que va del año ante la desaceleración de las ganancias corporativas y la amenaza para la economía en general por una potencial escalada en la disputa comercial entre Estados Unidos y China.
Un fuerte incremento en la tasa de crecimiento del suministro de crudo este año, especialmente de Estados Unidos, Arabia Saudita y Rusia ha llevado a varios analistas a temer que la demanda no sea suficiente para absorber el combustible extra.
Los precios del barril han tenido un acusado descenso desde octubre frente a indicios de una desaceleración económica. El Brent ha tenido una pérdida de casi 30 por ciento.