Abogar por la buena salud mental se ha convertido en una preocupación de millones de personas en el mundo, ya que tras el confinamiento o aislamiento obligatorio decretado por los gobiernos para contener la propagación del Covid-19, muchos han tenido que enfrentar cuadros de soledad, ansiedad, estrés, e incluso, problemas de pareja.
Para los expertos, estos episodios son consecuencia de la suma de diversos factores tales como el largo encierro, el exceso de información sobre la pandemia, el miedo y la incertidumbre a contagiarse, entre otros.
De hecho, dada esta situación, recientemente la Organización Mundial para la Salud (OMS) entregó algunas recomendaciones para cuidar la salud mental, dentro de las que se encuentran: no fumar, comer saludable, hacer ejercicio e invertir tiempo en pasatiempos y actividades que distraiga la mente de las personas.
“Definitivamente, la naturaleza del ser humano es ser social. Por ello, durante la cuarentena se han agudizado este tipo de problemas mentales. Así que la recomendación es apostarle a desarrollar actividades virtuales en grupo que nos permitan hacerle frente a esta situación y mejorar nuestra salud emocional”, explica María Isabel Correa, psicóloga y cofundadora de Moai, emprendimiento colombiano especializado en este tema.
Este emprendimiento desarrolló una plataforma que reúne en un solo lugar planes y experiencias, con los que busca que las personas formen “parches” y se conecten a través de sus pasiones como pintar, meditar, practicar yoga, trucos de magia, belleza y otras actividades lúdicas.
“Queremos combatir el aislamiento social dándole la posibilidad a niños y adultos de conectarse con otras personas que comparten gustos similares a los suyos, por medio de una experiencia digital distinta en la que grupos pequeños participan, interactúan y comparten una actividad liderada por anfitriones, emprendedores o personas con talentos como artistas, profesores, entre otros”, explica Correa.
En medio de esta coyuntura, este proyecto, que cuenta con el respaldo de la Caja de Compensación Familiar del Valle del Cauca (Comfandi), también se convirtió en una fuente de ingresos para profesionales que cuentan con un talento especial para enseñar y desarrollar prácticas apasionantes para grandes y pequeños.