Los bancos que buscan ganar cuota en el mercado crediticio mediante la compra de cartera a otras entidades ya no la tendrán tan fácil, pues la Superintendencia Financiera endurecerá las condiciones para acceder a esos créditos, originados por firmas que no están bajo su vigilancia.
En esencia, las entidades crediticias tendrán que ser mucho más cuidadosas a la hora de ‘salir a comprar préstamos’ de entidades que solo se dedican a esa labor y no adquirirlos de cualquier entidad que se los ofrezca.
En ese sentido, deberán fijar políticas estrictas para tal fin que los obliguen a conocer a fondo a los originadores de esos créditos, que se van a comprar, verificar su trayectoria y experiencia en el mercado, así como constatar su conocimiento del mercado que atienden (hipotecario, consumo, vehículo).
Dichas condiciones están incluidas en un proyecto de circular que el organismo de vigilancia y control dio a conocer para comentarios del mercado.
En el proyecto también se incluye la obligación para los bancos de “conocer y tener bien documentadas y actualizadas las políticas y procedimientos de crédito del originador en cada uno de los procesos (otorgamiento, seguimiento y recuperación)”.
El superintendente Financiero, Gerardo Hernández, ya había anunciado medidas de este corte para tratar de evitar un mayor deterioro en la calidad de la cartera.
