Gracias a una inversión de 16 millones de dólares de capital privado, Bogotá tiene el cuarto mecanismo de desarrollo limpio más grande del mundo en materia de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero: Biogás Doña Juana.
Esta planta, la iniciativa más ambiciosa después de Corea, Brasil y China por la cantidad de reducciones estimadas cada año (800.000 toneladas de CO2, lo mismo que producen 180.000 vehículos al recorrer 30 kilómetros cada día durante un año), hace una labor equiparable a la de 133 millones de árboles maduros durante un año, o un bosque de 128.000 hectáreas, gracias a la cantidad de gases efecto invernadero que evita que se queden en la atmósfera.
La planta le permite recibir al distrito, cada año, cerca de 1.700 millones de pesos por cuenta de los Certificados de Emisiones -CER’s-, de los que recibe 24 por ciento (hoy, cada CER tiene un valor de 4 euros).
La puesta en operación de la planta permite mitigar los impactos ambientales producidos por la emisión de Gases Efecto Invernadero –GEI-, al tiempo que mejora la estabilidad de la masa de basuras y trae beneficios para la ciudadanía.
Con los recursos provenientes de los CER’s, la Administración Distrital hará inversiones para mejorar la calidad de vida de las comunidades cercanas, vía formulación y puesta en marcha de proyectos productivos, de agua potable y saneamiento básico, mejoras en vivienda y espacios públicos, seguridad alimentaria, y la generación de ingresos a través del aumento en la competitividad de la población.
El Relleno Sanitario Doña Juana recibe un promedio de 6.500 toneladas diarias de basura, que son dispuestas en su totalidad de manera técnica, en celdas impermeabilizadas, con drenaje de lixiviados y emisión de Biogás. Gracias a ella, se logra el tratamiento, aprovechamiento y destrucción de 13.700 metros cúbicos normalizados/h. de Biogás, que en los próximos 20 años equivalen a reducir más de 14 millones de toneladas de CO2 equivalente.