L a expansión de los centros comerciales, la aparición de las tiendas por departamento y el auge de los supermercados de conveniencia son algunas de las huellas que marcan el paso del comercio colombiano en estos años.
Gracias a los proyectos inmobiliarios consolidados, nuevas marcas han penetrado el mercado, lo que ha permitido al consumidor barajar toda suerte de opciones para que pueda seguir las últimas tendencias.
En general, el comercio es protagonista en la contribución al PIB y la generación del empleo, gracias a inversionistas locales y extranjeros que aprovechan una clase media en ascenso y dispuesta a comprar.
Junto con la hotelería, esta actividad ha sido la base para que el sector servicios se considere motor del crecimiento de la economía, aunque no ha dejado de recibir en sus variaciones la influencia de la coyuntura económica.
Existen otros indicadores que advierten el crecimiento de la actividad. Ese es el caso de las ventas en los grandes almacenes minoristas e hipermercados.
Mientras que en 1997 las ventas totales eran de 6,8 billones de pesos, en el 2001 totalizaron 10,4 billones de pesos y en el 2013, ascendieron a 29,3 billones de pesos, última cifra disponible en las estadísticas de el Departamento Nacional de Estadísticas, Dane.
Respectivamente, el empleo ha crecido: 82.966 plazas, 68.377 y 112.276, en cada uno de los años en mención. El acumulado al primer trimestre del 2014 es de 113.088 empleos.
La última Encuesta Anual del Comercio publicada este año, da cuenta de que las ventas anuales sumaron en el 2013, 186,3 billones de pesos, siendo el sector del comercio al por mayor el que tiene la más importante participación (52,5 por ciento). Todo el sector ocupa más de 512.515 personas.
Con un mayor poder adquisitivo de los consumidores y en la medida en que las grandes ciudades se copa la oferta comercial, las marcas han llevado la competencia a las pequeñas y medianas poblaciones con potencial. Eso explica que el auge petrolero y las mejores condiciones de vida en Meta y Casanare abrieran la puerta al comercio organizado.
Estadísticas de la Asociación Nacional de Centros Comerciales (Acecolombia) muestran que en el país existen 196 centros comerciales –con áreas superiores a los 5.000 metros cuadrados–, cuando en el 2003 solo funcionaban 60. En total, 55 municipios colombianos tienen al menos un complejo de estos. Hace 7 años, se concentraban solo en 16 de ellos. En estos complejos, especialmente, varias marcas se han establecido en Colombia: Zara, Forever 21, Burger King, Payless, Starbucks, Domino’s y Papa John’s son algunas de las extranjeras que han llegado. Seguramente, en los años que vienen las compras virtuales marcarán la pauta en la dinámica del sector.
EL DINAMISMO DEL SECTOR HA RENOVADO LA COMPETENCIA
‘COSECHA’ DE C. COMERCIALES
Los centros comerciales se expanden y atraen marcas locales y extranjeras. Acecolombia, gremio del sector, dice que en el país operan 196 con áreas mayores a 5.000 metros cuadrados. En el 2003 solo funcionaban 60.
ATERRIZAJES DE CHILE
Con la llegada de Falabella en el 2006 se presentaron dos hechos relevantes: la incursión de los chilenos y la llegada de su oferta en tiendas por departamentos, supermercados y centros comerciales supermercados.
CONVENIENCIA Y PRECIO
En materia de servicio, los locales de pequeño formato, en los barrios que compiten con las tiendas, algunos con promesa de precios bajos, han cambiado hábitos de los consumidores. Los exprés, Oxxo y D1 han aparecido.
SE FUE UN ‘PESO PESADO’
Para dar prioridad a su operación en Francia, en el 2012 se fue del mercado colombiano la cadena Carrefour, después de 15 años de operaciones. Le vendió sus locales a Cencosud de Chile, que trajo sus tiendas Metro y Jumbo.